Abengoa quiere sobrevivir. En medio de la lucha por evitar un concurso de acreedores, la empresa española desarrolla Vista Ridge, el proyecto más interesante en el sector del agua en Estados Unidos. Para ello, necesita inversores.
Según informa el San Antonio Current, Abengoa busca nuevos inversores para llevar a cabo el desarrollo de Vista Ridge. La empresa con sede en Sevilla necesita inversión para financiar el 80% del ambicioso proyecto del agua para la ciudad de San Antonio (Texas). La inversión total prevista es de aproximadamente 840 millones de dólares.
Abengoa se reunirá esta semana con sus clientes del San Antonio Water System para supervisar y gestionar la financiación. En esta reunión, se garantizará la transparencia del proceso y se recogerán las propuestas de inversores que se ajusten al proyecto.
El Abengoa Vista Ridge consiste en el desarrollo de una infraestructura para el suministro de agua en San Antonio durante los próximos 30 años. Para ello, se construirá un enorme acueducto de 225 kilómetros de longitud. Abengoa se encarga del diseño, construcción, mantenimiento, operación y financiación del proyecto. El crecimiento anual de la ciudad de San Antonio es de 20.000 habitantes, por lo que su abastecimiento de agua es un reto.
Éxito en la II California Water Summit
Este ambicioso proyecto ya impresionó a finales de junio en la II California Water Summit. En este evento, que reunió a expertos de todo el mundo en construcción de infraestructuras del agua, tuvo lugar una exitosa ponencia sobre los aspectos más relevantes de Vista Ridge.
Abengoa Vista Ridge se desarrolla bajo el modelo de parternariado público-privado o PPP. Las asociaciones público-privadas contractuales tienen como objetivo la coordinación de los sectores público y privado. De esta forma, su principal función es dar respuesta a las necesidades de financiación de proyectos que necesitan ayuda pública y privada.
El proyecto de San Antonio cuenta con una fuerte oposición que no logra convencer a las autoridades para detener los planes de construcción. Las quejas se centran en el previsible aumento de impuestos sobre el agua y en el enorme impacto natural de las obras. Sin embargo, Abengoa mantiene sus esperanzas en la construcción del acueducto. Pesca inversores en el agua para salir a flote.