La polémica está servida con el proyecto de la I-77. En el ojo del huracán, Cintra Infraestructuras, la filial de autopistas de Ferrovial. El Departamento de Justicia de Carolina del Norte investiga a la empresa española por la construcción de la autopista y solicita nuevos informes.
La oficina de Roy Cooper, Fiscal General de Carolina del Norte, está investigando a Cintra, que desarrolla el proyecto de la Interestatal 77. En el centro de toda la polémica está la construcción de carriles de peaje. El fiscal pretende asegurarse de que los carriles de peaje de la autopista no producirán pérdidas económicas.
Cintra tendrá que presentar informes y planes de negocio a la fiscalía, al Departamento de Transportes de Carolina del Norte y a su empresa I-77 Mobility Partners para acreditar la solvencia de su proyecto. Roy Cooper solicitó la investigación de la filial española después de escuchar las preocupaciones de legisladores y líderes empresariales locales sobre los proyectos en quiebra de la empresa.
Sin embargo, las obras ya están en marcha. Ferrovial completó en mayo de 2015 la financiación de la I-77, con una inversión total estimada en unos 581 millones de euros y con un periodo de concesión de 50 años a partir de la apertura al tráfico, prevista para 2018.
Cintra, encargada de diseñar y construir la infraestructura, ampliará la calzada de la autopista en ambos sentidos a lo largo de 40 km. Además, en tres tramos está prevista la reconstrucción total del pavimento ya existente. Será en estos tramos donde se añadirán los polémicos carriles de peaje electrónico, los denominados “managed lanes”.
Estos carriles están diseñados para mejorar las condiciones del tráfico en el área de la ciudad de Charlotte, con un rápido crecimiento poblacional y empresarial. Según Cintra, el proyecto potenciará el empleo local y la oportunidades de desarrollo económico de la zona.
Y en medio, una lucha por el poder
A favor de estos argumentos parece estar el republicano Pat McCrory, gobernador de Carolina del Norte y rival del fiscal Cooper en la candidatura por la gobernación. McCrory ha sido muy criticado por no cancelar el contrato de los carriles de peaje con Cintra.
Pero las críticas también le llueven al fiscal. Los hombres de McCrory le echan en cara haber dejado que comiencen las obras para después abrir una investigación, pues consideran que se le tendría que haber pedido documentación a la empresa española mucho antes.
Cintra tampoco se libra. Los carriles de peaje cuentan con la oposición de buena parte de los ciudadanos, que agrupados bajo el nombre Widen I-77, argumentaron en enero que el contrato con la empresa española era inconstitucional. Sin embargo un juez desestimó su demanda y acabó con sus aspiraciones de detener el proyecto y así evitar los peajes, que ellos consideran abusivos. Además consideran que los nuevos carriles no supondrán un alivio para el tráfico, sino que estancarán los carriles “gratuitos” de conductores que no quieran pagar.
En medio de toda esta tormenta de opiniones y de la lucha de poder por el cargo de Gobernador de Carolina del Norte, Cintra continúa sus trabajos. Veremos si la autopista les lleva a alguna parte o si los carriles de peaje les salen muy caros.
