La compañía ferroviaria francesa SNCF tuvo el pasado año 12.219 millones de euros por depreciaciones al considerar que la situación macroeconómica y, sobre todo, el aumento de la competencia en su actividad, le obligaba a disminuir el valor contable de las líneas férreas, los trenes y las estaciones.
En concreto, el valor de la red férrea francesa quedó disminuido en 9.600 millones de euros, el de los trenes en 2.200 millones y las estaciones en 450 millones, precisó en un comunicado la Sociedad Nacional de Ferrocarriles (SNCF), que en 2014 había contabilizado 261 millones de euros de beneficios. Se trata con esas depreciaciones de tener en cuenta el «contexto de evolución de las nuevas movilidades, con una revisión de las perspectivas de circulación para el periodo 2016-2025».
En detalle, se trata de asumir un contexto macroeconómico de baja inflación, un «aumento de la competencia multimodal» -en referencia indirecta a la irrupción del autobús en el transporte interurbano, pero también a los vuelos de bajo costo y a la práctica de compartir coche-, y el mantenimiento de los peajes ferroviarios a niveles «elevados».
Al margen de estas depreciaciones, que la empresa minimizó como «escrituras contables que no cuestionan las ambiciones del grupo» y no afectan ni a la tesorería ni a los planes de desarrollo, el resultado neto habría sido de 377 millones de euros, frente a los 135 millones de 2014. En cualquier caso, el resultado operativo corriente (que incluye de nuevo las depreciaciones) disminuyó a 1.258 millones de euros en 2015, frente a los 1.759 millones el ejercicio precedente. También bajó, aunque más ligeramente, el margen operativo -de 4.630 millones de euros en 2014 a 4.425 millones- y representó un 14,1 % de los ingresos, frente al 15,5 % que había supuesto un año antes.
El volumen de negocios, por su parte, se incrementó un 5 % en cifras absolutas (un 0,9 % en comparables) a 31.393 millones de euros, y un 33 % de esa cifra procedió de las actividades internacionales.
En detalle, el negocio de viajes y viajeros reportó 15.391 millones, un 9 % más en términos brutos y un 2,5 % en datos equivalentes, y de ese total 468 millones (un 9,1 % más) procedió de la explotación de las estaciones. Ese avance integra, en particular, la ampliación de su gama de productos de bajo coste (como los trenes Ouigo o los autobuses Ouibus y Ouicar), con los que transportó a 4,8 millones de viajeros, que la empresa confía en que aumenten a 9,2 millones en 2016.
El negocio de la explotación de las vías férreas supuso 6.526 millones de euros de cifra de negocios, un alza del 1 %. El logístico 9.251 millones de euros (un 2,3 % más en valores absolutos, un 0,5 % menos en comparables).
La filial Keolis facturó 5.002 millones de euros, un incremento del 12,2 % en datos brutos y un 7 % en equivalentes, y la actividad inmobiliaria representó 641 millones, un 4,9 % más en cifras absolutas, un 3 % más en comparables.
El volumen de inversiones se redujo a 8.171 millones de euros, comparados con los 8.684 millones en 2014, y de ese dinero 5.100 millones se consagraron a la renovación de vías (otros 1.100 millones a la construcción de la nueva línea de alta velocidad entre Tours y Burdeos). Con respecto a las perspectivas, la SNCF augura para 2016 un incremento de su facturación de «cerca del 2 %» en términos comparables, con un margen operativo estable y un objetivo de 750 millones de euros en productividad.