El pasado mes de marzo Apple presentaba su último smartphone, el iPhone SE, el terminal más barato de la compañía que, además, vuelve a las 4 pulgadas. Sin embargo, a pesar de esta novedosa apuesta, el iPhone 6s es el buque insignia de los de Cupertino, junto a su versión maxi, el iPhone 6s Plus.
Los nuevos teléfonos de Samsung, Huawei y LG compiten con el iPhone 6s. Sus cámaras, sus pantallas, sus baterías y diseños son comparados inevitablemente con el iPhone 6s. Por eso, después de probar este terminal de Apple no podíamos dejar pasar la oportunidad de contaros nuestra experiencia.
Primeras impresiones
En primer lugar, debo decir que hasta que no cayó en mis manos el iPhone 6s no había tenido la oportunidad de probar iOS en un teléfono de manera continua. Es decir, que sí había tenido un iPhone en las manos, pero no el suficiente tiempo como para saber si me gustaba o no como sistema operativo.
Enamora. Este es un teléfono bonito cuyo cuerpo se encuentra fabricado en aluminio, algo que le da un aspecto elegante y premium. Cuenta con una pantalla de gran calidad y con un buen tamaño: 4,7 pulgadas (las 4 pulgadas de modelos anteriores a mí se me quedan pequeñas). El terminal es bastante delgado, con 0,71 cm de grosor y no es demasiado pesado (143 gramos). Encaja perfectamente en la mano, por lo que lo podemos agarrar sin miedo a que se nos caiga.
Otra cosa es que podamos llegar a cualquier parte de la pantalla con solo una mano. Y es que nada más comenzar a usarlo me encontré con un problema: cada vez que quería volver hacia atrás tenía que utilizar la otra mano para pulsar en la esquina izquierda de la pantalla. Cabe señalar que el iPhone 6s solo cuenta en la parte delantera con su característico botón central que, además de funcionar como lector de huellas, también permite acceder al menú principal, pero que no nos da opción a retroceder (los demás teléfonos suelen tener tres botones bajo la pantalla). Esto es algo que eché en falta hasta que descubrí que con dos toquecitos sobre el botón la pantalla se deslizaba hacia abajo, hasta casi la mitad, dejando al alcance del dedo la opción de volver atrás.
Como decimos, bajo la pantalla se sitúa el botón circular que nos permite acceder a la pantalla principal, llamar a Siri y desbloquear el teléfono con la huella, mientras que encima se encuentra la cámara delantera de 5 Mpx. Por detrás, en la parte superior izquierda se sitúa la cámara trasera de 12 Mpx con flash. En el lateral derecho encontramos el botón de bloqueo y la bandeja para la SIM, mientras que en el izquierdo están los dos botones que nos sirven para controlar el volumen y la pestaña para silenciar el teléfono. La parte inferior alberga el hueco para la conexión de los auriculares, el puerto de carga, el micrófono y el altavoz.
Más allá de mi pequeño percance con la “inexistencia” de un botón de “volver”, he de decir que mi experiencia con iOS ha sido bastante buena: tener sincronizado el iPhone 6s con mi iPad es algo que me ha resultado bastante útil y he comprobado lo bien que funciona Siri. También he probado el 3D touch, que si funciona de maravilla. Solo hay que presionar un poco más de lo normal y accedes a esa función “oculta” que permite hacer cosas como previsualizar un correo o una imagen de Instagram sin necesidad de abrirla, pero sinceramente no es algo que me llame demasiado la atención, ni que vea necesario (si no hubiese descubierto cómo volver atrás con una sola mano seguro que sí lo vería como una función imprescindible).
Cámara
Apple nos ha vendido este iPhone 6s como todo un experto en fotografía. Es cierto, la cámara es magnífica, saca muy buenas imágenes, pero no es perfecta.
Los 12 Mpx de la cámara trasera permiten realizar capturas de muy buena calidad. Con unas condiciones óptimas de luz, e incluso con algo de movimiento, la cámara de este teléfono difícilmente encuentra rival, y es que su rapidez de disparo es indispensable para lograr grandes resultados. Sin embargo, la imposibilidad de poder jugar con parámetros nos puede llevar a echar de menos el tener un poco más de control sobre la imagen, algo que otros dispositivos sí que ofrecen a los usuarios.
En situaciones de poca luz, desde luego las imágenes no llegan a ser tan espectaculares, pero el resultado sigue siendo impresionante. No nos olvidemos de que estamos hablando de un móvil, que sí, que tiene muy buena cámara, pero que al fin y al cabo es un móvil, con una cámara de móvil y con un flash de móvil.
La cámara delantera tiene 5 Mpx, más que suficientes para realizar selfies sin ningún problema. No cuenta con flash, pero si con la opción de iluminar la pantalla en blanco consiguiendo un efecto similar. Así los resultados en situaciones de poca luz son también muy buenos.
El iPhone 6s cuenta además con el modo live, con el que a la hora de visualizar las imágenes tomadas no solo vemos la fotografía estática sino que además podemos ver un pequeño vídeo en movimiento de los momentos anteriores a la toma de la imagen.
Batería
El iPhone 6s tiene una batería de 1715 mAh. Pero que no cunda el pánico. Estamos acostumbrados a que la media de la batería de los smartphones sea de unos 2.500 mAh, pero en el caso de Apple, su “pequeña” batería permite al dispositivo una gran autonomía.
Hasta un día entero podemos pasar sin tener que preocuparnos de buscar un enchufe en el que cargar el teléfono. Aunque como siempre, su duración dependerá del uso que le demos.
Por si acaso, comentar que cuenta con función de carga rápida, por lo que en caso de que nos quedemos sin batería solo necesitaremos de un par de horas para tener listo el terminal.
Características del iPhone 6s:
- A la venta: septiembre de 2015
- Dimensiones: 13,83 x 6,71 x 0,71 cm
- Peso: 143 gramos
- Pantalla: 4,7 pulgadas, pantalla retina HD
- Sistema Operativo: iOS 9
- Procesador: Chip A9 con arquitectura de 64 bits
- RAM: 2 GB
- Memoria interna: 16 GB, 64 GB y 128 GB
- Batería: 1715 mAh
- SIM: Nano SIM
- Cámara: trasera de 12 MP y delantera de 5 MP
- Conectividad: wifi, bluetooth versión 4.2 y NFC
- Colores: plata, oro, gris espacial y oro rosa
- Precio: desde 749 euros