El fondo Oceanwood incluye en el orden del día la prohibición del voto del gigante chino HNA y la destitución de sus cuatro consejeros, y propone el nombramiento de cuatro independientes.
Guerra abierta en el accionariado de NH Hotel Group. El enfrentamiento entre el gigante chino HNA –mayor accionista de la cadena con una participación del 29,5%- y los fondos de inversión presentes en el capital del grupo -Oceanwood, Blackrock y Henderson, entre otros, y que controlan en la actualidad conjuntamente un 22%- sale del consejo de administración y se traslada ahora a la junta de accionistas.
Oceanwood, que controla a través de varios fondos un 10% del grupo, ha incluido nuevos puntos en el orden del día de la junta de accionistas, convocada para el 21 de junio, y que agravan el órdago contra HNA. Y es que el fondo propone el nombramiento de cuatro nuevos consejeros independientes, al tiempo que insta a la destitución de los cuatro representantes de HNA en el consejo.
Asimismo, Oceanwood pide que se ratifique que existe conflicto de intereses por la presencia en el consejo de miembros de HNA, después de que el grupo chino haya alcanzado un acuerdo para la compra del grupo hotelero Carlson Rezidor, que compite directamente con NH en varios mercados europeos.
El consejo de NH había propuesto a la junta fijar en 12 el número de consejeros del grupo, dejándolo como está ahora (con cuatro representantes de HNA, dos de Hesperia, uno de Oceanwood, uno ejecutivo –el consejero delegado, Federico González Tejera- y otro independientes). Pero el fondo reabre la batalla por el gobierno corporativo y reclama ampliar el número de consejeros independientes. Incluso si no se ejecuta la separación de los cuatro representantes de HNA, la propuesta de Oceanwood de nombrar cuatro independientes más elevaría los asientos no dominicales a la mitad de los integrantes.
Una larga batalla
El desencuentro viene de lejos. Los fondos de inversión presentes en el capital de la cadena ya se habían enfrentado al grupo chino HNA, máximo accionista con el 29,5%, por su intento de tomar el control del consejo de administración sin lanzar una opa. La guerra parecía resuelta, pero ha vuelto a reabrirse.
La presión conjunta de los fondos consiguieron hace un año que Oceanwood obtuviera un asiento en el consejo de administración. Las gestoras llevan desde su entrada en el accionariado, a finales de 2013, reclamando mayores esfuerzos en el recorte de la deuda y de los costes, al tiempo que solicitan que se recupere ya el pago de dividendos. Unas reclamaciones que han venido tensando las relaciones con otros accionistas, principalmente el gigante chino HNA.
En las últimas semanas, los fondos ya habían lanzado otro órdago en toda regla y habían solicitado la destitución del copresidente de NH Charles B. Mobus –representante de HNA- por un presunto conflicto de intereses. Y es que Mobus, en su calidad de consejero director de la consultora Benedetto, Garland & Company, habría estado asesorando a la propia HNA para la adquisición de la cadena Carlson Rezidor.
El órdago se llevó a la reunión del consejo de administración de NH de hace dos semanas. Y se saldó con un parche para apaciguar la batalla accionarial. El consejo aprobó –no por unanimidad– declarar la inexistencia de ningún conflicto de intereses en la actividad de su copresidente, al tiempo que anunciaba que pondrá en marcha “mecanismos de seguimiento” para garantizar que tampoco lo haya en el futuro.
Y la otra concesión a las quejas de los fondos fue la confirmación de la renuncia de Taisa Markus a ser propuesta en la próxima junta de accionistas como consejera independiente de la cadena. Los fondos habían puesto el grito en el cielo por el anuncio de su futuro nombramiento sin que ni siquiera estuviera convocada la junta y por la relación de amistad entre Markus y el propio Mobus. El nombramiento de la nueva consejera hubiera servido para restituir la composición de 13 miembros del órgano de gobierno (actualmente tiene doce asientos).
El otro accionista de referencia del grupo, Hesperia (con un 9,09%), también ha venido mostrando en los últimos meses su malestar. Hasta ahora alineado con la estrategia de HNA, el otro copresidente de NH, José Antonio Castro –presidente del grupo Hesperia-, llegó a dilatar durante semanas la firma de las cuentas anuales de la cadena para mostrar su disconformidad con el ritmo de recorte de deuda y porque aún no tenga fecha concreta la recuperación del pago de dividendos.