«Si no queremos ser Venecia, algún límite a la carga del turismo habrá que poner en Barcelona», dice la que se perfila como la próxima alcaldesa de Barcelona tras imponerse en las elecciones municipales al frente de Barcelona en Comú.
Ganadora de las elecciones municipales de Barcelona, Ada Colau no rehúye los temas polémicos cuando se le pregunta. En una entrevista con El País, la candidata de la plataforma de izquierdas Barcelona en Comú, y muy probable próxima alcaldesa, defiende la necesidad de poner límites al turismo de la ciudad «antes de que se desmadre» y confirma su pretensión de imponer una moratoria a nuevos proyectos hoteleros y a la ampliación del parque de apartamentos turísticos.
«La situación está fuera de control en los lugares donde hay más presión turísitica. Hay que aplicar una moratoria sobre nuevos hoteles y pisos turísticos, hacer un censo y hacer una política preventiva antes de que se desmadre», sostiene Colau, que apunta que intentará que la moratoria esté aprobada en los primeros seis meses de la legislatura y que tenga carácter general. «Hay que hacer un plan de turismo pensando en los vecinos y vecinas. No podemos tener una burbuja turística después de la inmobiliaria».
En los últimos meses, las quejas de los barceloneses por la enorme afluencia de turistas se han multiplicado. Y también se denuncia la existencia de problemas de convivencia por la proliferación de los apartamentos turísticos de alquiler por días en determinadas zonas de la ciudad. ¿Es posible limitar el número de turistas que llegan a Barcelona? «Hay que mirarlo seriamente», responde la líder de Barcelona en Comú, que propone un nuevo plan estratégico del turismo de la ciudad que «debe servir también para ver cuál es el límite de carga, porque alguno habrá».
«Si no queremos ser Venecia, algún límite de carga del turismo habrá que poner en Barcelona», subraya la candidata. «Podemos crecer más, pero no sé hasta dónde».