El vicepresidente y consejero delegado de Meliá Hotels International, Gabriel Escarrer, ha presentado durante la primera jornada de la Feria Internacional de Turismo (Fitur), el nuevo panorama al que se enfrenta la compañía este año. La asentada economía colaborativa liderada por plataformas como Airbnb o HomeAway no asustan al grupo hotelero y se enfrenta a ella con los objetivos marcados.
“Lo único que digo es que todos juguemos en la misma categoría y que estemos ambos sectores o igual de regularizados o igual de desregularizados”, afirmaba Escarrer durante el encuentro en Fitur.
Pero también ha aprovechado para apuntar que “la regulación va por lo menos dos años atrasada al segmento de la economía colaborativa”. Por lo que afirma que la única solución es que “la empresa trabaje por su cuenta”.
Y lo hace apuntando hacia la mejora de sus marcas y la hipersegmentacion internacional. Y, sobre todo, “en crear la cultura ‘servicios’. Crear experiencias que puedan llegar a nuestros clientes y convertirnos en expertos en los destinos donde estemos. Y también, incrementar la categoría de nuestros establecimientos, salirnos un poco de lo que es ‘la venta de camas’. Nosotros no vendemos camas, vendemos experiencias”.
De esta manera hacia referencia a la distinción del servicio que puede proporcionar un establecimiento hotelero con respecto de un piso alquilado en una plataforma como Airbnb. Y se apoya en ofrecer unas experiencias que van mas allá de la habitación, como la comida que se puede degustar, las salas de reuniones, un spa, y sobre todo ser más vacacionales. Algo que, por otra parte, también intenta ser un nicho de negocio que pretende pelear la plataforma estadounidense.
Desde Meliá afirman que el segmento vacacional va a salir menos perjudicado de la economía colaborativa, “ya que tiene más presencia en las capitales”.
Perspectiva internacional
Escarrer afirma que el Brexit «no ha tenido impacto alguno sobre el turismo», aunque si se ha observado que en algunos destinos se está ralentizando la demanda británica, sobre todo «lo que es el segmento más alto y la temporada alta».
En cuanto a Estados Unidos, Escarrer ha señalado que apenas quedan unas horas para el nombramiento de Donald Trump como presidente y eso puede incidir, no solo en la política de migración, sino también en relaciones internacionales como la de México y la apertura o no de Cuba, además de la inestabilidad y el terrorismo.
Por ello el grupo ha optado por la diversificación internacional de los hoteles Meliá y consolidar su producto en España.
Estrategia de negocio enfocada al ‘bleisue’
Esta nueva modalidad turística, el ‘bleisure’ surge de la combinación del viaje de negocios y el de ocio, uniendo ambas opciones en una sola.
Consistiría en que el cliente de negocios encontrara en una serie de comodidades del hotel, pudiendo ser localización o servicios, los motivos para alargar su estancia unos días ya sea solo o en familia.
“El hombre de negocios busca cada vez mas oportunidades de ocio. Donde el segmento de la comida y la bebida también juegan un papel importante, donde contaremos con chefs de prestigio como los hermanos Torres”, afirmaba Escarrer.
Perspectivas para el 2017
Meliá tiene previsto abrir durante el 2017 al menos 23 hoteles en distintas ciudades en 15 países diferentes, España incluida.
De este modo, desde el grupo apuntan a que este será otro año de “intenso crecimiento”, ya que el pasado año incorporó 19 nuevos establecimientos en 10 países.