La presidenta de Banco Santander, Ana Botín, ha aprovechado la presentación de resultados de la compañía de 2016 para defender en papel de la banca durante los últimos años. En su alegato, ve todo positivo, incluidas cláusulas suelo o preferentes. La disculpa es que prestan buenos servicios a bajo precio.
Con esa premisa se ha presentado en público la presidenta de Santander, que ha defendido el papel que han tenido los bancos durante la crisis y el funcionamiento del mercado hipotecario español, que «ha permitido a muchas familias ser dueñas de sus hogares».
En esa defensa desmedida que ha llevado a cabo, ha querido dejar claro la polémica sobre el rescate a las entidades financieras. Asegura que «los bancos españoles no recibimos ayudas públicas«, es más, «contribuimos con 20.000 millones al saneamiento de las cajas», ha añadido Botín.
La presidenta de Santander tampoco ha eludido los temas más delicados, como los desahucios, las preferentes o ahora por las cláusulas suelo. Botín, sin adentrarse en valor la situación de los miles de afectados por todos estos temas, cree que la clave está en que las entidades siguen dando «buenos servicios a precios competitivos».
En su opinión, el día a día con los clientes es lo que permite mantener la confianza, y desde el banco recuerdan que ellos no ofrecieron hipotecas con cláusulas suelo y por eso no se plantean ahora cambiar su política comercial.
En todo su discurso no hubo un atisbo de autocrítica sobre el sector. Botín ha explicado que «el mundo ha cambiado» y eso obliga a hacer las cosas de otra manera, no sin antes destacar que los bancos han promovido el acceso de miles de familias a una vivienda.
Santander ante el nuevo mundo no-global
Al margen de esa defensa a ultranza de la banca tradicional, la presidenta de Santander también tuvo que abordar cuestiones que afectan a su compañía de manera directa, como la llegada de Donald Trump o la salida de Reino Unido de la Unión Europea.
Botín, ha reconocido que las medidas del presidente de EEUU van a afectar a México. Ha asegurado que no van a cambiar las previsiones sobre el país, porque “ha hecho muchas reformas”. Pero ha reconocido que los beneficios del grupo se verán afectados por el tipo de cambio del peso mexicano.
En Reino Unido, por parte, ha dicho que no se plantea reubicaciones del banco pese a Brexit. Preguntada por sus consecuencias, la presidenta del Banco Santander ha dicho que a la entidad le afectará lo que afecta a la economía de ese país, que de momento «lo está haciendo bien».
En este sentido, ha reconocido que el mayor impacto será el tipo de cambio, tras la depreciación de la libra. «Creceremos con el resto del mercado», ha añadido Botín, que respecto al conjunto del grupo financiero, ha dicho que de cara a 2017, se mantienen los objetivos previstos.