Probablemente nunca en nuestra vida nos encontraremos ante semejante tesitura de tener que hacerle un regalo a cualquier miembro de una familia real europea. De momento, sabemos que el protocolo real es bastante estricto a la hora de conocer en persona a la monarca británica por excelencia: “Aunque no haya códigos obligatorios de comportamiento para conocer a la reina; siempre se recomienda en el caso de las mujeres realizar un pequeño gesto de cortesía, mientras que los hombres deben asentir la cabeza ligeramente. Seguidamente, se debe dirigir a ella como “Your Majesty/Su Majestad” seguido de la palabra “Madam/Señora”. Igualmente, no se debe empezar a hablar hasta que ella comience. Del mismo modo, está totalmente fuera de lugar hacer preguntas personales o atreverse a cambiar el curso de la conversación”.
Al parecer esta familia real tan peculiar es muy popular entre los británicos, ya que siempre se muestran deseosos de saber más detalles sobre su lujosa vida privada. De hecho, hace menos de un mes se inauguró en Londres una exposición llamada ‘Royal Gifts’, en la que se reúnen por primera vez aproximadamente 200 regalos. Estos obsequios provienen de las distintas visitas diplomáticas e intercambios entre jefes de estado efectuados a lo largo de 65 años de carrera diplomática: “Entre los objetos elegidos hay desde un pisapapeles de hueso de dinosaurio fosilizado, una coraza de oro precolombina, un retrato de Isabel II realizado con hojas de plátano o un marco de Tiffany & Co. con una fotografía dedicada”.
Ahora bien, si volvemos a la primera premisa del texto, ¿Qué puedo regalarle a la Reina Isabel II? La respuesta nos la ofrece el experto en familia real, Sally Goodsir: “El presente suele reflejar la artesanía nacional, sin embargo, también puede representar al donante o al receptor”.
Por otro lado, esto no quita que en otras ocasiones, distintos miembros de la familia hayan recibido extravagantes regalos como pueden ser; un sonajero de oro diamantes, rubíes y zafiros valorado en 38.000 euros que recibió la princesa Carlota de Inglaterra con motivo de su primer cumpleaños, o el óleo de dos metros y medio del renombrado artista británico Stephen Cawston valorado en 175.000 euros.
En este sentido, la casa real española tampoco se queda del todo atrás, ya que según confirma la lista publicada por la Casa del Rey: “Los Reyes de España recibieron 378 regalos en el año 2016. Uno de los que más repercusión mediática propició en su momento fue el realizado por el antiguo presidente de los Estados Unidos, Barack Obama; una cazadora personalizada de aviador para el Rey Felipe VI y dos candelabros de cristal para Letizia Ortiz. También recibieron multitud de libros, películas, discos de música, esculturas, pendientes, broches, pulseras, etc”. Incluso, muchos de ellos estaban totalmente personalizados, tal y como los que encontramos en páginas webs especializadas en obsequios originales como esta, al fin y al cabo, un simple detalle puede conquistar hasta el más rico de los corazones.
Lo que está del todo claro es que comprar regalos nunca es una tarea fácil, independientemente de que sean para la realeza o para nuestros seres queridos más allegados. Asimismo, lo resaltábamos en esta noticia la Navidad pasada: “Los españoles gastamos unos 2.000 millones de euros en regalos no deseados, por suerte muchos de ellos tienen el ticket regalo. Igualmente, los que menos aciertan con los regalos son los familiares de segundo grado, seguidamente de los compañeros de trabajo”.
