Miguel Zorita ha ostentado cargos en empresas en una parte importante de su trayectoria profesional. En ocasiones, incluso, ha representado los intereses de las sociedades o grupos en los que tenía cargos directivos. Tal y como hemos publicado en Diario16, en algunos de esos casos para beneficio propio. Su método de trabajo, o al menos es lo que vende, es la intermediación entre empresas con dificultades financieras y la banca, de la que dice que tiene el respaldo.
Tras su salida del Grupo San José y sus negocios en Chile, Zorita da un salto cualitativo pretendiendo hacerse con la mayoría de la empresa Secopsa, una operación en la que, nuevamente, fracasa. Tras esto, comienza una carrera de movimientos societarios para hacerse con el control de empresas industriales de valor añadido, como Daorje S.L. Círculos empresariales consultados por Diario16, nos confirman las sospechas de que la presencia de Zorita en Duro Felguera como asesor de la empresa asturiana, colocado por la banca acreedora, no tiene otro fin que hacerse con el control de Duro, algo que, a priori, sería incompatible, sin embargo, para Zorita no hay nada imposible ni existe la incompatibilidad. Por otra parte, fuentes sindicales consultadas por Diario16 nos confirman que no tienen ningún tipo de información de cómo Zorita se hizo con el control de la sociedad.
Miguel Zorita tomó el control de Daorje a través de su relación con el fondo Springwater, la empresa que ha adquirido diferentes sociedades españolas en apuros para rescatarlas y que las ha llevado a una situación peor. En la actualidad, la tecnológica asturiana está controlada desde Luxemburgo, según la información contenida en el Registro Mercantil y en el Registre du Commerce de Luxembourg, por las sociedades Zima Equity Investments (España), Dofman Advisory S.L. (España) y Continuum S.A. (Luxemburgo). Esta sociedad tiene como accionistas a sociedades registradas en Delaware (Estados Unidos), Panamá, Suiza y Malta. Ese control a Daorje se está ejerciendo a través de una empresa luxemburguesa: Engineering Solutions Sarl, que en 2015 era el socio único de Daorje. Un año más tarde, en octubre de 2015, Continuum cede un 30% de las participaciones sociales de ESS a una empresa propiedad de Zorita, Zima Equity Investments, S.L. Hay un hecho importante en estas empresas: en Luxemburgo no hay obligación de presentar resultados, por lo que la opacidad está garantizada. En los últimos meses parece ser que Gruschka ha dimitido como consejero, pero manteniendo su condición de apoderado solidario lo que, junto a su 35% de participación en Daorje, le garantiza cierto control de la compañía. En la actualidad, tras una ampliación de capital, la estructura accionarial de la compañía asturiana es la siguiente:
• Miguel Zorita, a través de Zima Equity Investments: 48,32%
• Santiago Martínez Carballal, a través de Dofman Advisory: 16,68%
• Martin Gruschka, a través de Continuum: 35%
Como vemos, Zorita controla una empresa tecnológica en Asturias y, actualmente, asesora a Duro Felguera, es decir, que tiene cierto control sobre dos de las más importantes industrias tecnológicas del Principado. Ante esta situación, y con el perfil del personaje, ha llegado el momento en que el Gobierno del Principado y agentes sociales, tomen cartas en el asunto o pidan explicaciones, tanto a Zorita como a quien dice él representar. En el caso de Daorje, control accionarial; en el caso de Duro Felguera, el control sobre las acciones a acometer para reestructurar la deuda de la compañía y de su futuro inmediato.
Según afirman diferentes fuentes, Zorita fue una imposición a Duro Felguera por parte de la banca. Según el propio Zorita, él tiene la confianza absoluta de la banca. ¿Esta pretendida fe ciega en él no tendrá su origen en los favores o en la información que obra en poder de Zorita tras ser presidente de Deloitte? ¿Qué importancia tiene la información que Zorita pudiera tener de ciertas entidades para que sigan teniendo relevancia tantos años después de su salida de la auditora? ¿Nadie le va a pedir a Zorita que garantice con hechos y documentalmente lo que dice ser?
Tras su salida del Grupo San José y sus negocios en Chile, Zorita da un salto cualitativo pretendiendo hacerse con la mayoría de la empresa Secopsa, una operación en la que, nuevamente, fracasa. Tras esto, comienza una carrera de movimientos societarios para hacerse con el control de empresas industriales de valor añadido, como Daorje S.L. Círculos empresariales consultados por Diario16, nos confirman las sospechas de que la presencia de Zorita en Duro Felguera como asesor de la empresa asturiana, colocado por la banca acreedora, no tiene otro fin que hacerse con el control de Duro, algo que, a priori, sería incompatible, sin embargo, para Zorita no hay nada imposible ni existe la incompatibilidad. Por otra parte, fuentes sindicales consultadas por Diario16 nos confirman que no tienen ningún tipo de información de cómo Zorita se hizo con el control de la sociedad.
Miguel Zorita tomó el control de Daorje a través de su relación con el fondo Springwater, la empresa que ha adquirido diferentes sociedades españolas en apuros para rescatarlas y que las ha llevado a una situación peor. En la actualidad, la tecnológica asturiana está controlada desde Luxemburgo, según la información contenida en el Registro Mercantil y en el Registre du Commerce de Luxembourg, por las sociedades Zima Equity Investments (España), Dofman Advisory S.L. (España) y Continuum S.A. (Luxemburgo). Esta sociedad tiene como accionistas a sociedades registradas en Delaware (Estados Unidos), Panamá, Suiza y Malta. Ese control a Daorje se está ejerciendo a través de una empresa luxemburguesa: Engineering Solutions Sarl, que en 2015 era el socio único de Daorje. Un año más tarde, en octubre de 2015, Continuum cede un 30% de las participaciones sociales de ESS a una empresa propiedad de Zorita, Zima Equity Investments, S.L. Hay un hecho importante en estas empresas: en Luxemburgo no hay obligación de presentar resultados, por lo que la opacidad está garantizada. En los últimos meses parece ser que Gruschka ha dimitido como consejero, pero manteniendo su condición de apoderado solidario lo que, junto a su 35% de participación en Daorje, le garantiza cierto control de la compañía. En la actualidad, tras una ampliación de capital, la estructura accionarial de la compañía asturiana es la siguiente:
• Miguel Zorita, a través de Zima Equity Investments: 48,32%
• Santiago Martínez Carballal, a través de Dofman Advisory: 16,68%
• Martin Gruschka, a través de Continuum: 35%
Como vemos, Zorita controla una empresa tecnológica en Asturias y, actualmente, asesora a Duro Felguera, es decir, que tiene cierto control sobre dos de las más importantes industrias tecnológicas del Principado. Ante esta situación, y con el perfil del personaje, ha llegado el momento en que el Gobierno del Principado y agentes sociales, tomen cartas en el asunto o pidan explicaciones, tanto a Zorita como a quien dice él representar. En el caso de Daorje, control accionarial; en el caso de Duro Felguera, el control sobre las acciones a acometer para reestructurar la deuda de la compañía y de su futuro inmediato.
Según afirman diferentes fuentes, Zorita fue una imposición a Duro Felguera por parte de la banca. Según el propio Zorita, él tiene la confianza absoluta de la banca. ¿Esta pretendida fe ciega en él no tendrá su origen en los favores o en la información que obra en poder de Zorita tras ser presidente de Deloitte? ¿Qué importancia tiene la información que Zorita pudiera tener de ciertas entidades para que sigan teniendo relevancia tantos años después de su salida de la auditora? ¿Nadie le va a pedir a Zorita que garantice con hechos y documentalmente lo que dice ser?