Nadie sabe cómo, por qué ni de dónde sacó el dinero Miguel Zorita para hacerse con el control absoluto de Daorje, tal y como ya publicamos en Diario16. Lo que sí se sabe es que el dinero y las acciones de la empresa se encuentran en Luxemburgo, tal y como queda reflejado en la documentación del Registro mercantil del país centroeuropeo.
Existe una guerra comercial entre dos empresas acereras indoeuropeas debido principalmente a la crisis de sobreproducción y sobrecapacidad en la que está sumido el sector a nivel mundial. La producción de acero bruto se ha disparado en un 300% desde el año 1980, mientras que la demanda se ha reducido en un 27%. Ante esta situación la respuesta de las dos grandes corporaciones indoeuropeas, Tata y Arcelor Mittal, para mantener sus beneficios ha sido el inicio de una guerra comercial, la exigencia de un mayor proteccionismo para luchar contra la producción china y el ajuste estructural de costes y de producción. Esta guerra la están pagando los trabajadores, como se puede comprobar en la reestructuración salvaje de plantilla que Arcelor Mittal aplicará en Italia: 4.000 despidos y una rebaja salarial del 20%.
Sin embargo, esto no sólo tendrá consecuencias en la producción de las plantas de Arcelor Mittal en Europa sino que se proyectará también en sus proveedores. Uno de ellos es Daorje, la empresa con la que se hizo Miguel Zorita de un modo oscuro, dado que la tecnológica asturiana tiene como uno de sus principales clientes a la acerera indoeuropea.
La sobreproducción y la sobreexplotación del sector va a afectar de manera directa a Daorje porque cuando se produce un proceso de reestructuración de plantilla en la empresa matriz, los proveedores lo sufren a través de, en primer lugar, reducción de pedidos, en segundo lugar, renegociación de los contratos de relación empresarial. En ambos casos, el proveedor tendrá que realizar ajustes en la misma medida que la sociedad cliente. Por tanto, Daorje se encuentra en serio peligro. Ante esta situación, ¿qué está haciendo Miguel Zorita? ¿Ha preparado algún plan de contingencia o ha diseñado algún nuevo proyecto de expansión de líneas de negocio para paliar los efectos de la crisis del sector acerero en general y de Arcelor Mittal en particular? No está haciendo nada, por lo que los puestos de trabajo de Daorje están en peligro. Estamos en la antesala de un nuevo «éxito» de gestión empresarial de Zorita.
La situación de Arcelor Mittal va a tener un reflejo negativo en Daorje y este hecho puede ser una de las causas por las que Zorita pretenda hacerse con la presidencia de Duro Felguera. Como ya informamos en Diario16, una de las razones por las que la situación de Duro no avanza de un modo más positivo por las gestiones del ejecutivo valenciano está, precisamente, en la condición que está poniendo a todas las grandes multinacionales o grandes fondos no especulativos que se están poniendo en contacto con la empresa asturiana para entrar en el capital de la misma de un modo u otro: la firma de un compromiso por el cual Zorita tendrá que ser nombrado presidente de Duro Felguera, algo que, evidentemente, estas grandes empresas o grandes fondos rechazan porque conocen perfectamente las capacidades que tiene el valenciano para enviar a la quiebra toda empresa a la que toca, exactamente igual que su socio Martin Gruschka.
Si Zorita llegara a la presidencia de Duro Felguera, una de sus primeras decisiones sería la adquisición de Daorje, operación por la que él, al ser el máximo accionista de la tecnológica, se beneficiaría económicamente, más allá del millón de euros anuales que ya está cobrando de Duro por un presunto asesoramiento que no va más allá de buscar una solución que le beneficie a él y a quien lo ha impuesto. No es casualidad que las únicas gestiones que están teniendo un efecto positivo en Duro Felguera son las iniciadas por Ángel del Valle y su Consejo de Admnistración. Ya informamos de que se ha logrado cerrar el cobro de una cantidad de 80 millones de euros que se adeudaban a la empresa asturiana, hecho que se hará efectivo en las próximas semanas. Esta gestión que aliviará la liquidez de la compañía no fue realizada por Miguel Zorita, evidentemente.
Mucha gente tiene que dar explicaciones sobre la presencia de Zorita en Duro Felguera, empezando por quien le puso ahí y obligó a la empresa asturiana a pagarle un salario de un millón de euros anuales. Conociendo el perfil del personaje, ¿cómo es posible que una entidad bancaria como el Banco de Santander pueda confiar en él con el currículum lleno de fracasos interesados que tiene el valenciano? La respuesta a esta pregunta es fundamental y el Santander está obligado a confesar los motivos que le llevaron a imponer a Zorita al Consejo de Duro Felguera o a demostrar los méritos reales del valenciano para que se tomara tal decisión, méritos que, hasta el momento, son desconocidos para el resto de la humanidad salvo que la verdadera intención sea desguazar a la empresa.
En referencia a la situación en que se puede encontrar Daorje en un futuro cercano a causa de los movimientos de su principal cliente, los comités de empresa de Daorje y Duro Felguera, la banca financiadora de Duro y el propio gobierno del Principado de Asturias deben preguntar de modo inminente a Zorita sobre cómo quedará la tecnológica asturiana por los planes de Arcelor Mittal, sobre qué piensa hacer para solucionar la situación y, sobre todo, que aclare la situación del capital de Daorje. Zorita tiene la obligación de explicar estas cuestiones, no sólo respecto a la compañía de Avilés sino también respecto a Duro Felguera porque están en juego casi 3.000 puestos de trabajo y la propia subsistencia del sector industrial del Principado. Los movimientos que está haciendo Zorita en las dos empresas asturianas sólo sirven para satisfacer sus intereses y, hasta ahora, nadie le ha querido parar los pies. Con el currículum de Zorita alguien tiene que tomar medidas y sacarle del mapa empresarial asturiano porque, si no se hiciese así, el sector industrial del Principado está en verdadero peligro de desaparecer.
