El gigante de la tecnología móvil tiene cierta incapacidad para quedarse quieto sin hacer nada. Pese a que no se trata de algo nuevo, puesto que la idea de crear un Operador Móvil Virtual (OMV) viene de muy lejos, tras el lanzamiento de un servicio musical vuelve a surgir con fuerza la posibilidad de ofrecer a sus clientes una compañía de telefonía propia.
Si ya había bastantes “enemigos” para los operadores de telecomunicaciones, ahora se postula uno de tamaño incalculable. De este modo, el presidente de Telefónica César Alierta tendrá que añadir a la lista OTTs (y preocupaciones personales) además de Google y Facebook, a Apple. En este sentido, la compañía presidida por Tim Cook iría un paso más allá y con la creación de un operador virtual pasaría a ser competencia directa de los operadores con red.
Según adelante Business Insider esta semana, Apple estaría teniendo conversaciones oficiales para lanzar un servicio de telecomunicaciones bajo el formato de OMV tanto en Estados Unidos como Europa. Además, según cita la publicación, en estos momentos la compañía de la manzana mordida ya estaría haciendo pruebas (a nivel privado) en suelo estadounidense, y habría tenido reuniones formales con compañías de teleco europeas.
La oportunidad de negocio que ve Apple con todo esto no va más allá de poder controlar a todos sus clientes a través de su propia red (alquilada como cualquier OMV), pero con la sensación de que es un servicio propio. De momento no se sabe a que operador alquilaría la red, aunque algunos rumores apuntan a que el objetivo de Apple sería utilizar varios a la vez. De este modo, y mediante la e-SIM, conseguiría la mejor red en cada momento.
Pese a todo, el hecho de que todavía esté en una fase de pruebas muy temprana hace indicar que el desarrollo del proyecto estaría encaminado para una consolidación a largo plazo. Es más, hace casi cinco años ya se empezó a hablar de esto entre rumores y mediasverdades, y hoy todavía sigue siendo una gran incógnita. Así pues, calculan que probablemente no llegaría antes del año 2020. No obstante, hay indicios que llevan a pensar que Apple habría metido una marcha más. Hace pocos días se conoció que junto a Samsung trabajaba de manera decidida en el desarrollo de tarjetas e-SIM con la finalidad de llevar integradas dichas tarjetas en el terminal móvil para operar con la mejor red en cada momento.
A esto habría que sumar que generalmente Apple se ha mostrado como una compañía totalmente integral. El último ejemplo lo tiene con su servicio de Apple Music, pero también se ha visto con temas de salud o entretenimiento, donde la compañía presidida por Tim Cook no quiere dejar nada fuera de su propio ecosistema, aunque eso a veces no salga bien.
Las dudas sobre algunos servicios
Pese a que la mayoría de las acciones que lleva a cabo Apple suelen llevar el éxito asegurado, no es menos cierto que en el ámbito de los servicios sí ha tenido algunos errores. Uno de esos ejemplos es MobileMe. Se trataba de un servicio de localización de los productos que cada usuario tenía. La cuestión es que más tarde arrojaron todos los balones de la culpabilidad en el tejado de Steve Jobs.
Algo similar ha sucedido con iCloud y los servicios en la nube de Apple que se han visto muy débiles en cuanto a seguridad se refieren.
Ejemplos, copias e incertidumbre
Parece claro que si Apple tiene un ejemplo donde no mirarse eso es Mobile ESPN, un servicio de OMV que lanzó al mercado el famoso canal de deportes de la mano de Disney y que no tuvo mucho éxito, por no decir ninguno.
La mala comercialización y distribución fueron una de las causas que llevó al cierre de este singular operador que creyó que por tener una base fieles seguidores tendría éxito en esa aventura. No obstante, no fue el único problema, ya que las tasas de alquiler de la red también fueron un lastre. En este sentido, Apple se enfrentará al mismo problema. Al no disponer de red propia tendrá que acceder a un mercado mayorista, y esos costes son tan variables como inciertos.
Otro ejemplo muy cercano es el de Google y su Project Fi. Se trata también de una inmersión en la gestión de servicios telefónicos como OMV. De momento no está escalando más allá de Estados Unidos, por lo que su relativo éxito no deja de ser una incógnita. Sea como sea, Apple ha planteado un nuevo reto al sector de las telecomunicaciones. Tienen la opción de encontrar en los chicos de la manzana un fuerte aliado, o un enemigo más, y ya son unos cuantos.