Con ínfulas de guiño místico, Google parece representar el “Alfa y Omega” con el cambio de denominación corporativo al pasar a llamarse Alphabet.
Ante la ponzoña del verano como cómplice, Google ha anunciado la que será una de las grandes noticias empresariales del año, su cambio de denominación corporativa por el del Alphabet. De este modo, el gigante tecnológico cambiará su estructura empresarial para mejorar la gestión y poner sus productos y divisiones de I+D bajo el paraguas de este nuevo nombre.
Según han informado desde el blog oficial de la compañía, este cambio se produce dentro de unos márgenes de buena marcha empresarial, y solo pretenden “hacerla más limpia y sensata”. Así al menos lo ha explicado el consejero delegado, Larry Page.
En cuanto a la disposición formal, Alphabet será a partir de ahora la matriz que englobará a Google, como principal división de la compañía, con el objetivo de hacer la gestión de una empresa en constante expansión y con divisiones muy diferentes, más eficiente y con capacidad de crecimiento. Como parte de la reestructuración, Sundar Pichai, jefe de producto de Google, pasará a ser consejero delegado de Google, empresa central del nuevo conglomerado al generar unos ingresos anuales de 60.000 millones de dólares.
La intención detrás de la fundación de Alphabet es colocar en una estructura más independiente empresas de Google como la división de inversiones de capital Google Ventures, Google Capital o subsidiarias de investigación y desarrollo como Google X.
Con estos cambios Page y Brin pasan a adoptar formalmente roles más estratégicos dentro de la compañía. El presidente de Google, Eric Schmidt, pasará a ser presidente ejecutivo de Alphabet.
La gestión de un nuevo orden
Este cambio de Google llega con ínfulas de verdadera creencia en un proyecto que va más allá de lo que nunca haya hecho antes una empresa. De hecho, su dominio web, ‘abc.xyz’, podría ser un juego de analogías a las formas griegas en que se representa el principio y fin de todo. Una vuelta de tuerca de la compañía en su ansia de estar en todo.
Al margen de esos guiños que busca Google, Alphabet cotizará bajo el ya existente código bursátil GOOGL y GOOG, pero los resultados de Google se reportarán como parte de la nueva organización.
Tras el anuncio, efectuado después del cierre de Wall Street, las acciones de la empresa en el mercado continuo subían un 5,41 % hasta los 699 dólares el título.