Sacyr obtuvo un beneficio neto de 61,7 millones de euros en el primer semestre del año, lo que supone un incremento del 1,6% respecto a un año antes, gracias al crecimiento del negocio internacional y a la aportación de Repsol, según informa Europa Press.
Los resultados semestrales del grupo no incluyen aún las operaciones de venta de la filial patrimonial Testa a la socimi Merlín, dado que se realizaron en el mes de julio.
Respecto a las cuentas de los seis primeros meses de Sacyr la participación del 8,89% que tiene como segundo accionista de la petrolera aportó 35 millones de euros.
La compañía que preside Manuel Manrique elevó un 14% su cifra de negocio entre los pasados meses de enero y junio, hasta 1.339 millones de euros, de los que un 51% provino del negocio exterior. El beneficio bruto de explotación (Ebitda), de su lado, despuntó un 50% y se situó en 155 millones.
La multinacional española ha anunciado la recuperación del dividendo en efectivo que tenía suspendido desde el año 2008 y pasará a pagar 0,050 euros por acción este mes de septiembre.
Por otro lado, Sacyr ha presentado un nuevo «ciclo estratégico» de crecimiento, que se basará en el refuerzo de su negocio internacional y con el que pretende doblar su beneficio bruto de explotación (Ebitda) en el horizonte de 2020, hasta situarlo en alrededor de los 750 millones de euros.
La compañía de construcción, servicios y concesiones aborda esta nueva etapa de crecimiento tras dar por finalizado el periodo de «reordenación estratégica y reestructuración financiera» que ha llevado a cabo en «los últimos cuatro años», según ha asegurado el presidente del grupo, Manuel Manrique.