Prácticamente todas las personas que viven en países desarrollados tienen un teléfono móvil. En ese segmento queda poco margen de crecimiento para operadores y fabricantes, por lo tanto hay que repensar el negocio. Y todo parece muy claro: la televisión.
En España la batalla por liderar los contenidos de televisión tiene nuevos dueños. Los operadores de telefonía luchan por el fútbol, las series, las películas… Ahora también se aferran a la subvención de televisores, decos o como cada uno quiera llamarlo. Lo importante es situar cada compañía como primera opción sabiendo que las portabilidades fijas son menos.
Ante esta tesitura Telefónica ha decidido repartir los huevos en diversas cestas. Así, el operador azul ofrecerá en 2016 servicios de vídeo en siete nuevos países de Latinoamérica: Ecuador, Uruguay, Panamá, Costa Rica, El Salvador, Guatemala y Nicaragua, ha informado la compañía en un comunicado.
Estos servicios comprenderán tanto la modalidad de vídeo bajo demanda (VoD) como canales de televisión ‘lineales’ o tradicionales, y serán ofertados a lo largo del próximo año.
«Tenemos la vocación de convertirnos en la primera empresa de TV de pago del mundo en español y portugués«, ha afirmado el director de la Unidad de Vídeo de Latinoamérica de Telefónica, Luis Delamer. El directivo ha asegurado además que en 2016 pretenden comercializar estos servicios «a más del doble de países» que en la actualidad.
La empresa de telefonía española oferta a día de hoy estos servicios en Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Perú y Venezuela, mediante tecnologías como el satélite (DTH), cable (CATV), VoD, televisión IP (IPTV) y OTT.
Telefónica cuenta con más de 4,5 millones de clientes de televisión de pago en Latinoamérica y con 8,2 millones en total, según datos de la propia compañía. «Estamos determinados a seguir impulsando el desarrollo de la industria de la televisión de pago en la región y los contenidos ya se ubican en el centro de nuestra oferta comercial», ha añadido Delamer.