IAG, la matriz de British e Iberia, se cansa del retraso en la ampliación del aeropuerto londinense y amenaza con concentrar sus planes de crecimiento en España y en Irlanda. «Si el Gobierno [británico] sigue vacilando, entonces me llevaré mi negocio a otra parte», advierte el consejero delegado del grupo, Willie Walsh.
El Gobierno británico sigue sin decidirse a impulsar el proyecto de construcción de la tercera pista de Londres-Heathrow, el mayor aeropuerto de Europa… y también uno de los más saturados. Y el principal grupo aéreo en el aeropuerto londinense empieza a cansarse y ha lanzado la advertencia de mirar otros horizontes, lo que puede acabar impulsando el futuro de Madrid-Barajas.
IAG, el holding que agrupa a British Airways, Iberia Vueling y Aer Lingus, ha avisado de que el parón del ‘nuevo Heathrow’ puede hacer que el grupo reoriente sus operaciones y concentre sus expansión futura en España y en Irlanda. «Si el Gobierno [británico] continúa vacilando sobre una nueva pista, entonces me llevaré mi negocio a otra parte. Ahora tenemos aerolíneas en Dublín y Madrid, y podemos expandir nuestra empresa allí, apoyando y fortaleciendo las economías irlandesa y española», ha advertido el consejero delegado de IAG, Willie Walsh, en un artículo publicado en Daily Mail. «Eso significa que España e Irlanda se llevarán los beneficios económicos y los nuevos puestos de trabajo de nuestros planes de expansión»
El Gobierno británico ha decidido aplazar hasta verano de 2016 su decisión sobre la eventual construcción de una tercea pista en Heathrow, a la espera de nuevos estudios de impacto ambiental, lo que hace que British Airways -el mayor operador del aeropuerto londinense- vea cómo su capacidad de crecimiento se vea muy condicionada. El Parlamento británico concluyó en un estudio publicado el pasado julio que la construcción de la tercera pista constituye la mejor de las opciones para ampliar la capacidad aérea de Londres, pero sin descartar impulsar el aeropuerto de Gatwick como vía alternativa.
«Cómo deben de estar riéndose en París, Frankfurt, Ámsterdam, Dubai o Pekín. Todas estas ciudades tienen gobiernos que valoran la contribución de la aviación a sus economías», subraya Walsh en su artículo. «Ellos se han asegurado de que sus aeropuertos dispongan de las infraestructuras necesarias para afrontar el crecimiento de la industria y para conectar sus países con una economía globalizada».
El Ejecutivo británico maneja todavía tres posibles proyectos: una tercera pista en Heathrow que costaría unos 18.600 millones de libras (25.800 millones de euros), la expansión de la actual pista norte de ese aeropuerto, que requeriría una inversión de 13.500 millones de libras (18.700 millones de euros), y la construcción de una nueva pista en Gatwick (9.300 millones de libras o 12.900 millones de euros). A la espera de que haya una decisión definitiva, IAG mete presión y pide más celeridad; si no, amenaza con concentrar sus nuevas rutas en Madrid-Barajas y en Dublín.