El teorema de los huevos y las cestas explica muchas situaciones económicas. Por ejemplo esto valdría para entender por qué el fabricante taiwanés de los iPhones y iPads de Apple, Hon Hai, más conocido Foxconn, se ha pasado al desarrollo de robots.
En una entrevista con medios de comunicación chinos, el fundador del grupo Hon Hai, Terry Gou, ha manifestado que el uso de robots en la manufactura es «una tendencia irreversible», pero que no llevará necesariamente a reducir el número de empleados en las fábricas. La empresa taiwanesa ya ha fabricado el robot «Pepper» en cooperación con la japonesa SoftBank, que se vendieron por internet en Japón en un minuto, y también brazos robóticos industriales, de los que ha instalado en sus fábricas 48.000.
Hon Hai es el mayor fabricante mundial de productos electrónicos del mundo y a mediados de junio llegó a un acuerdo con SoftBank y el grupo chino Alibaba para invertir en la empresa de robótica SoftBank Robotics Holding Corp.
¿Desconfianza en Apple?
Esta misma semana se ha conocido que Apple puede tener un mal 2016. Desde que en 2007 saliese a la venta el primer iPhone, las cifras de la compañía y el número de unidades vendidas no han parado de crecer. Entonces, el iPhone de primera generación logró vender casi 1,4 millones de dispositivos. Ahora, en 2015, hablamos de más de 231 millones de iPhone vendidos.
Viendo estas cifras y su tendencia al alza, que se mantiene desde la presentación del primer iPhone hasta ahora, parece impensable hablar de una caída en las ventas. Sin embargo, Katy Huberty, directora general del departamento de investigación de la consultora Morgan Stanley, predice que las ventas de iPhone se reducirán en 2016. Ni siquiera la salida al mercado del iPhone 7 sobre el que ya circulan rumores en internet, podrían salvar la caída.
Las primeras estimaciones apuntaban a que en el próximo año Apple lograría vender 247 millones de unidades, volviendo a superar todas las cifras. Pero, ahora Katy Huberty cambia su predicción para decir que las ventas de iPhone en 2016 serán de 218 millones de dispositivos, los que se traduciría en una caída del 5,7%, una situación que no se ha dado todavía en la historia de Apple.
Todo esto podría explicar, en parte, que Foxconn no quiera generar ningún tipo de dependencia de Apple en el futuro inmediato.
Y no solo robots
Pero no solo se trata de poner los huevos en la cesta de los robots. Recientemente se ha sabido que Foxconn ha lanzado una oferta para comprar la nipona Sharp, que atraviesa dificultades económicas y mantenía negociaciones con un fondo estatal japonés.
La empresa taiwanesa, que ya había propuesto a Sharp la adquisición de su rama de producción de pantallas de cristal líquido (LCD), ha puesto ahora sobre la mesa la opción de comprar la totalidad de la compañía japonesa con sede en Osaka (oeste). Otro ejemplo más de diversificación por si las cosas en Apple no terminan de ir bien.