Señalar a la luna y mirar el dedo es una metáfora de lo que ha podido suceder con Uber. La tecnología está transformando muchos sectores, el del taxi incluido. Por ello, no se trata de una empresa que pueda flirtear con la ilegalidad, sino de un cambio de paradigma.
“Que una compañía adopte un modelo de negocio que no cumpla con todas las reglas del fair play termina siendo anecdótico. Lo realmente importante es que se está cambiando el entorno del sector y los usuarios de forma muy rápida debido a la tecnología”. Esa es la clara diferencia entre mirar el dedo o la luna. Comprender que Uber ha podido, en gran medida, dar un rejonazo al sector del taxi (o de los desplazamientos en coche), pero que lo importante es el cambio de sentido económico. Alejandro Sánchez, director de Hailo en Madrid, tiene muy claro que la relación entre clientes y proveedores de servicio ha cambiado debido a la “generación de nuevas necesidades y la tecnología”.
Según cuenta Alejandro a SABEMOS, el sector del taxi ha sufrido mucho durante la crisis. Por eso, aplicaciones como Hailo pretenden ayudar a que levante cabeza. Su funcionamiento, sencillo hasta el hartazgo, permite a los usuarios de taxis que soliciten un vehículo desde sus dispositivos móviles de un modo sencillo y rápido. Además, Hailo solo trabaja con taxistas autorizados, una de esas cosas que lógicamente se suele lanzar contra Uber.
“Una cosa son las oportunidades de mercado y la introducción de nuevas tecnologías, y otra es faltar a la legalidad. Son cosas distintas”. En este sentido Alejandro parece asumir con toda la caballerosidad la competencia que venga. A fin de cuentas se tratará de una lucha por ver quién ofrece un mejor servicio a los usuarios. Aunque eso sí, que se encuentre dentro del marco legal.
“Uber solo es la punta del iceberg”. El director de Hailo en Madrid tiene muy claro que la polémica compañía simplemente es el símbolo de algo que está por venir y que es mucho más grande. Quizá los responsables de todo esto también seamos los medios al haber puesto en el centro del tablero a Uber, pero Alejandro añade otra cosa que es muy importante: “Lo que pasa es que es una empresa con una capitalización enorme”. La gran valoración que tiene en el mercado, más de 50.000 millones de dólares, hace que se vea como un gigante global cuyo impacto es desconocido. Aunque la realidad tiene “dos debates”, aclara Alejandro. Por un lado la situación legal y, por otro, la cuestión tecnológica, que es la que realmente hará crecer a este sector.
¿Hay vida lejos de Uber?
Aunque no lo parezca por cómo se refleja la situación en los medios de comunicación, claro que hay vida más allá de Uber. De hecho, en un sector que ha sufrido tanto la crisis, lo más importante sería aportar herramientas nuevas al mercado para incentivar a los usuarios a coger el taxi como medio de transporte.
En este sentido, Alejandro recuerda que gracias a Hailo “los taxistas ganan porque les añadimos clientes extras. Además, generamos una tecnología que provoca que los clientes se acerquen y les facilitamos el uso del taxi”. El dato concreto que aporta es que con la utilización de esta aplicación un taxista puede tener un 20% más de servicios al día. De este modo, el cálculo semanal no deja lugar a dudas.
Dentro de las bondades que encuentran los trabajadores del taxi, los usuarios también son los grandes beneficiados de este tipo de aplicaciones o herramientas como Hailo. Alejandro, por encima de todo, destaca el hecho de que no haga falta sacar la cartera para pagar. Además, advierte de que el 70% de las transacciones se hacen vía tarjeta de crédito (sin coste adicional), y eso es un gran avance, dado que se trata de un sector muy tradicional.
Un sector dinámico
Justo en ese momento surge la gran duda: ¿El sector del taxi se ha quedado anticuado? La respuesta de Alejandro es bastante certera: “Lo que han tardado en llegar son las apps, pero la adaptación ha sido muy rápido”. De hecho en sus propias carnes ha vivido toda esa transformación y confiesa que “nos sorprendió la facilidad con la que se adaptaron los taxistas a las nuevas herramientas tecnológicas”.
En este sentido, Alejandro insiste en que “aunque no lo parezca, el sector del taxi es muy dinámico, por ejemplo en cuanto a empleo, en Madrid hay más de 15.000 licencias y 12.000 en Barcelona”. Y no solo eso. “También es un sector que lo ha pasado mal con la crisis, y por lo tanto no se han acomodado, y han buscado nuevas fórmulas”.
De hecho, saca a colación que rápidamente se adaptaron a las radio-taxis, los GPS, los nuevos sistemas de navegación, y que, pese a la sensación generalizada, los taxistas siempre “han estado por la labor de adaptarse a todo”.
Por lo que respecta al futuro de Hailo en España, Alejandro desvela a SABEMOS que hay la intención “en breve” de abrir el servicio a nuevas ciudades como Bilbao, Sevilla y Valencia.
Además, quieren trabajar mucho en la versión que tienen para empresas (y autónomos), dado que introduciría grandes ayudas para éstas, sobre todo cuando son grandes y es más difícil llevar el control de gasto y desde Administración se complica la tarea de saber cuántos taxis utiliza cada empleado.
Imagen | ‘wired.co.uk‘