La empresa de mobiliario urbano ha planteado un ERE que afectará a 245 empleados de los 309 con los que cuenta en plantilla para subcontratar los trabajos.
La compañía propiedad del grupo publicitario francés JCDecaux planea llevar a cabo un despido colectivo de aproximadamente el 80% de su plantilla en los próximos meses. La dirección de Cemusa no ha especificado los motivos por los que adopta esta medida extrema más allá de razones de índole “económica y organizativa”. Sin embargo, esta reducción no conlleva paralelamente una caída en el volumen de actividad, sino que la empresa seguirá ofreciendo sus servicios pero a partir de ahora subcontratará los trabajos.
La falta de explicaciones y la negativa de la dirección a negociar los detalles del acuerdo se interpretan como “un ataque brutal para la plantilla” y “la liquidación de la empresas” por parte de los propios empleados, según el comunicado de CCOO. La región más afectada por este expediente de regulación será Madrid, en la que perderían su puesto 170 trabajadores de los 210 que residen en la capital.
El foco de atención está puesto ahora en las explicaciones que tengan que dar los responsables de dicha decisión sobre los supuestos problemas financieros de Cemusa, la cual fue vendida en 2015 por FCC a JCDecaux debido a su alto endeudamiento y su escasa rentabilidad. Los sindicatos ya han anunciado movilizaciones para frenar lo que consideran una medida “desproporcionada e irresponsable”.
El fracaso de un rescate
En realidad, Cemusa llevaba acumulando pérdidas considerables desde el 2012, con una deuda superior al valor de la empresa y contratos poco rentables en cartera. FCC estuvo en conversaciones con JCDecaux para la venta de su filial desde el año 2014, hasta que finalmente se formalizó la operación en noviembre de 2015 por 80 millones de euros. Entre las condiciones de la multinacional francesa respecto a la compra estaba el saneamiento de Cemusa, algo que FCC tuvo que asumir y dejó a la transacción prácticamente sin plusvalía.
Con la adquisición de Cemusa, JCDecaux amplió su posición en ciudades como Nueva York, Río de Janeiro, Brasilia, Madrid y Barcelona, así como en 41 aeropuertos españoles, entre los que se encuentran los de Madrid-Barajas y Barcelona-El Prat. Por su parte, la venta de su filial entraba dentro del plan estratégico de desinversión de activos iniciado por FCC con fecha límite en 2015. Dentro del proyecto, la compañía esperaba reunir un total de 2.200 millones para poder hacer frente a su delicada situación financiera.
