Tras pasar cuatro años en el Congreso de los Diputados representando a ICV en La Izquierda Plural, Joan Coscubiela (Barcelona, 1954) es el elegido por la formación ecosocialista para defender la candidatura de confluencia de Catalunya Sí Que Es Pot (CSQEP), que también incluye a Podemos, EUiA y Equo.
Habiendo sido secretario general de CCOO de Cataluña entre 1995 y 2008, Coscubiela puede representar la experiencia institucional y política que no tienen otros primeros puestos de la lista como el candidato Lluís Rabell o la escritora Gemma Lienas.
Si hay unas declaraciones que han marcado la campaña de CSQEP son las de Pablo Iglesias apelando al origen de algunos de los votantes. ¿Qué opina de estas declaraciones?
Creo que él ya ha aclarado lo que quería decir, y que si en un momento ha podido ofender a alguien ha pedido disculpas. Lo que defendemos es una cosa clara: Cataluña es un solo pueblo, con independencia del lugar en que has nacido y de la lengua que hables. Cataluña somos la gente que vivimos, trabajamos y luchamos en Cataluña. Pero que seamos un solo pueblo no quiere decir que seamos una sola clase social, que es lo que pretende el señor Mas.
Algunos le han acusado de «etnicista».
Creo que él hizo una llamada a que la gente que vive en los barrios y en las zonas más degradadas de las ciudades, aquellos que tienen más necesidad de políticas sociales, no se abstuviese de participar sino que se hiciese visible.
Podemos está protagonizando mucho la campaña de CSQEP. ¿ICV se siente cómoda en este papel de dejar paso a Iglesias?
No creo que sea así. Creo que el protagonismo de los dirigentes no solo de ICV, sino del conjunto de CSQEP es importante. Lo que pasa es que a algunos les gustaría que Cataluña fuese autárquica y nosotros tenemos bien claro que en unas elecciones que se celebran el 27 de septiembre, a menos de dos meses de las elecciones generales, relacionar Cataluña con España es importante. Entre otras cosas porque tenemos delante a alguien como Junts pel Sí que no han tenido ningún tipo de problema en votar con el PP todas las cosas que han querido: la reforma laboral, la amnistía fiscal, el pacto de estabilidad presupuestaria y hasta no sé cuántas leyes juntas. Por lo tanto, no deja de ser curioso cómo parece normal que yo vaya a Fuenlabrada a dar apoyo a los trabajadores de Coca-Cola y parece extraño que Pablo Iglesias venga aquí a dar apoyo a los trabajadores de Valeo. Ambos son trabajadores afectados por la reforma laboral del PP y CiU.
Pablo Iglesias, Pedro Sánchez de manera muy activa con el PSC… ¿Están preparando el terreno para la campaña de las generales?
Es una pregunta que me hacen mucho y que por sí misma tiene una trampa. Se da por hecho que estas elecciones resulta que solo podían participar personas de Cataluña cuando es bastante evidente que algunas fuerzas políticas tenemos la clara vocación de tener referentes estatales. También está Alberto Garzón, y Ska Keller, la portavoz del grupo verde alemán, que ha sido una de las personas que más han hecho por el derecho a decidir en Europa. Y bueno, porque a los griegos les coge en su campaña electoral, porque si no también hubiesen estado aquí, de la misma manera que Ernest Urtasun ha estado en Grecia.
¿Varufakis hubiese venido a dar apoyo a CSQEP o a la CUP, que lo invitó para la Diada?
Varufakis desde hace tiempo tiene relaciones con IU y con Podemos a nivel estatal, con ICV de manera muy nítida y tiene mucho que ver con el intento de construir una izquierda alternativa. Está claro que Varufakis plantea la continuidad en la Unión Europea y el euro, que es lo que nosotros defendemos y no lo que defiende esta fuerza política que usted me ha nombrado.
¿Por qué Alberto Garzón y Pablo Iglesias no han coincidido en ningún acto?
No tengo ni idea porque no me encargo de estas cosas, pero supongo que es porque pudiendo utilizar maquinaria pesada y distribuirla en muchos actos diferentes, para qué concentrarlos sólo en uno. Vaya, supongo que es esto.
¿ICV teme una fuga de votantes hacia Junts pel Sí o la CUP?
No, a mí en relación a la CUP lo único que me da miedo es que acabe por activa o por pasiva haciendo presidente a Artur Mas. Hasta ahora no lo han desmentido. Dicen que no lo votarán, pero lo que no han dicho es si con su abstención permitirán que se vote.
Mas, único candidato posible de JpS
¿CSQEP nunca daría apoyo a un eventual candidato de Junts pel Sí que no fuese Mas?
Creo que es al revés. Junts pel Sí han decidido hacer a Mas presidente. Si ellos piensan que esto no es, nosotros tenemos un candidato buenísimo que es Lluís Rabell.
Pero en el escenario de que Junts pel Sí no tuviese una mayoría y necesitase otros apoyos, algunos sugieren que la CUP y hasta CSQEP podrían apoyar candidatos alternativos a Mas. ¿Por ejemplo, si sonasen Antonio Baños o Raül Romeva… se llegarían a plantear este debate?
Es una propuesta tan increíble… Usted vio qué paso cuando algunos candidatos de Junts pel Sí insinuaron que no estaba claro si Mas era presidente. Se les tiró una avalancha de convergentes encima. Ahora, si la gente de Junts pel Sí considera que Mas no es un buen presidente, pues no sé, que lo digan. Pero son ellos los que tienen que decirlo. Nosotros tenemos un candidato que es Lluís Rabell, para qué estar pensando en otro.
Ustedes insisten en que en estas elecciones no solo se vota independencia sí o no…
No, es que no se vota independencia sí o no. No es que no solo no se vote, sino que no se vota, esto sólo se puede votar en un referéndum.
Se votan las propuestas para formar el nuevo Parlament pero es inevitable pensar en esta dicotomía. Hasta el PP o Ciutadans no paran de hablar del debate independentista.
Hay cuatro partidos que les interesa hacer esta polarización de independencia sí o no por sus propios intereses. Pero es bastante evidente que el resultado de estas elecciones nunca se podrá interpretar con esta clave. Primera, porque las fuerzas políticas catalanas y la ciudadanía catalana no están de acuerdo con esto. Segunda, porque ni tan solo los que dicen que son plebiscitarias se ponen de acuerdo en si se han de contar escaños o votos. Junts pel Sí dice escaños, la CUP dice votos. Y tercera, porque es que nadie de fuera de Junts pel Sí le dará este carácter plebiscitario. Si nos lo están diciendo de todo el mundo, nos lo está diciendo Europa, si nos lo dijo Alex Salmond. Nunca se puede sustituir un referéndum por unas elecciones, nunca. Esta manera es una manera de tapar. Mas ya no sabía como continuar siendo presidente y se ha buscado esta cuestión. Algunos le han querido acompañar en el viaje, ellos sabrán.
Si la confluencia que quieren hacer con Podemos en las elecciones estatales tiene un papel destacado en el Gobierno, ¿ICV forzará un referéndum para Cataluña?
El referéndum lo plantearemos sea cual sea el resultado de las elecciones catalanas y sea cual sea el resultado de las elecciones españolas. Y además, tenemos la autoridad moral de haber sido los que en el Congreso de los Diputados, en el grupo de Izquierda Plural, consiguieron que se votase en 2014 a favor del referéndum. Y tenemos la autoridad de formar parte de una alianza, tanto con IU como con Podemos, que ha planteado dos cosas: el carácter plurinacional del Estado español, que no es cualquier cosa, y en segundo lugar, que el referéndum es una exigencia de radicalidad democrática. Alguien en Cataluña habría de saber ver mejor lo que aportamos nosotros, que no lo aporta nadie. Nosotros estamos concentrados en buscar aliados y los otros en buscar adversarios. Y sumando adversarios no se avanza.
Déjeme preguntárselo de otra manera. ¿Si Pablo Iglesias es presidente del Gobierno, habrá un referéndum en Cataluña?
Yo estoy profundamente convencido de que en la próxima legislatura española, sea cual sea el Gobierno, habrá un referéndum en Cataluña. Pero es evidente que es mucho más fácil si ganan esas fuerzas políticas como Podemos o IU que se han declarado favorables al referéndum.
¿Qué piensa de las declaraciones de Barack Obama deseando una España fuerte y unida?
Que a CSQEP no nos importa ni nos interesa lo que digan Obama o Merkel, sino que nos importa y nos interesa lo que digan los ciudadanos de Cataluña, por eso exigimos el referéndum.
Han pasado de formar parte de la mesa a favor del derecho a decidir, de que Joan Herrera fuese al Congreso de los Diputados a pedir un referéndum, a que muchos les identifiquen en el bloque del no, al lado del PSC, del PP, de Unió, de Ciutadans… ¿Les duele que les metan en este saco a la hora de contar votos?
No, no nos duele. Forma parte de un proceso de descalificación. Ayer, Ciutadans nos acusaba de independentistas y Junts pel Sí de lo contrario. Sencillamente somos demócratas, como la inmensa mayoría de ciudadanos de Cataluña que lo que pide es un referéndum. Nosotros no nos hemos movido, los que se han movido son aquellos que con el interés de tener a Mas como presidente han querido forzar planteándonos que, sin haberlo conseguido, el derecho a decidir se había de dar por amortizado. Si es grave que el PP nos lo prohíba, es grave también que Mas lo intente dar por amortizado.
Ciutadans, «dramático para los trabajadores»
Hablan mucho de Ciutadans en los mítines. ¿Compiten por el mismo espectro electoral?
No, nosotros hablamos de nuestras propuestas pero lógicamente queremos informar de que Ciutadans, que se presenta como un partido regeneracionista, en la primera oportunidad que ha tenido, en las autonómicas celebradas en el resto del Estado, ha dado apoyo al PP más corrupto, el de Madrid, y al PSOE más corrupto, el de Andalucía. Y queremos advertir, para que la gente lo sepa porque ellos no lo informan, que tienen preparada una propuesta de reforma laboral mucho más dura a través del contrato único que lo que permite es el despido libre sin control judicial de ningún tipo. Que la gente lo sepa. Después cada uno vota a quien quiere. Pero sería un poco penoso que para sacarse de encima a Zapatero hayan votado a Rajoy y para sacarse de encima a Rajoy voten al dúo Rajoy-Albert Rivera. Sería bastante dramático para los derechos de los trabajadores, por lo que nosotros nos sentimos con la obligación de informar.
Parece que haya una batalla por el llamado cinturón rojo…
En las áreas metropolitanas, no sólo la de Barcelona, sino también la de Tarragona, la de Girona, la de Lleida, vive la inmensa mayoría de los ciudadanos catalanes. Es normal que los partidos hagamos mucho más énfasis en estos lugares. Sobre todo cuando, como consecuencia de determinadas políticas de exclusión hechas por la administración del pujolisme, esta gente se ha ido inhibiendo de las elecciones. En las últimas autonómicas ya no fue tanto así, y ahora nosotros tenemos un especial interés en que estas personas que han participado en las huelgas generales contra las reformas laborales, en la Plataforma de Afectados por la Hipoteca, en las mareas ciudadanas en defensa de la educación y de la sanidad pública, esta gente que son tan protagonistas de todas estas cuestiones sean visibles el día 27 votando. Es este el enfoque.
¿De que cree que se debería hablar más en esta campaña y no se está haciendo lo suficiente?
De las políticas que hará el próximo Gobierno sea cual sea. Y aquí tenemos un Junts pel Sí que ha decidido hacer unas elecciones poco democráticas. Con amnesia en relación al pasado y silencio en relación al futuro. Creo que deben ser las primeras elecciones democráticas del mundo en las que alguien teoriza que no hace falta discutir de las políticas que se han hecho ni de las políticas que se harán, cuando todo el mundo sabe que es seguro que el gobierno que salga elegido deberá tomar decisiones.
En este sentido, ¿le apena que sea precisamente Raül Romeva quien lidere este movimiento?
No, qué va. Cada uno tiene derecho a hacer lo que crea oportuno. El señor Mas ha considerado que Romeva podía ser útil. Él ha considerado que también podía ser útil. No tengo ningún problema en que Raül quiera poner una cara vistosa y agradable al servicio de una política que es un poco de caradura, la de Mas.
¿El discurso del eurodiputado ha cambiado?
El problema no es mío, es de él. Cuando tenga que congeniar su concepción ambientalista y de sostenibilidad con la política depredadora que ha aplicado históricamente CDC el problema de consciencia lo tendrá el, no yo. Todos tenemos contradicciones y cada uno las gobierna como puede. Aunque las suyas son bastante grandes, pero desde el principio le he respetado mucho. La vinculación política no es un estado canónico, para toda la vida. No requiere una declaración de amor.
¿Se considera parte de la nueva política?
No sé qué es nuevo y qué es viejo. Sé que mi primera actividad política institucional son los cuatro años que he estado en el Congreso de los Diputados. También es verdad que la política entró en mi vida cuando no tenía ni once años, que vinieron a detener a mi padre por formar parte de CCOO de Cataluña. Siempre he sido una persona con interés y formación política desde el punto de vista ciudadano. Sin referirme a nadie, anunciar que uno será honesto cuando empieza, es muy importante. Serlo después de cuarenta años lo es mucho más.