El pacto entre Convergència Democràtica (CDC) y Esquerra Republicana para presentarse juntos a las elecciones catalanas del 27 de septiembre contempla declarar formalmente la independencia entre seis y ocho meses después de las elecciones.
«Por primera vez se recoge todo el camino jurídico hacia la independencia», han asegurado a Europa Press fuentes próximas a la negociación. El pacto, han añadido, recoge los decretos y los pasos jurídicos para avanzar hacia la secesión pese que el Estado se oponga frontalmente, como esperan ambos partidos.
Se habla de estos entre seis y ocho meses porque es cuando los dos partidos calculan que habrán dado los pasos hacia la independencia suficientes para que la situación con el Tribunal Constitucional y la Agencia Tributaria sea insostenible.
Si ganan las elecciones y tienen mayoría suficiente para legislar, CDC y ERC apuestan por una «ley de transitoriedad jurídica» que supliría el marco legal español: las leyes del Estado seguirían vigentes a medida que se fuesen cambiando por leyes catalanas.
Con esta ley de transitoriedad se trata, según los negociadores, de dar «fundamento de derecho» a las decisiones que vaya tomando el gobierno y el Parlamento catalanes pese que a tengan la oposición frontal del Estado y no tengan cabida en la legalidad española.
Ante la imposibilidad de celebrar un referéndum soberanista pactado, CDC y ERC consideran que esta es la vía más plausible para preparar la «desconexión con España» pese a tener, previsiblemente, todas las instituciones del Estado en contra.
A finales de marzo CDC, ERC y las entidades soberanistas pactaron una hoja de ruta para declarar la independencia en 18 meses si después del 27 de septiembre había una mayoría soberanista en el Parlament.
Ahora CDC y ERC han decidido acelerar los plazos: presentarse juntas lo facilita ya que el programa del 27S es conjunto, y temen que esperar 18 meses haga morir el proceso soberanista de «inanición».
La lista
Presentándose junto a CDC, ERC ha renunciado a sus dos postulados iniciales: primero apostaba por ir en listas separadas y después por una sola lista sin políticos, dos planes que no se han visto realizados.
Los republicanos consideran que, a cambio, han logrado que se haga el primer plan detallado para avanzar hacia la independencia de Cataluña con el aval explícito del presidente Artur Mas. Los dos partidos están ultimando los detalles del acuerdo para poder presentarlo al resto de negociadores y darlo a conocer públicamente a los ciudadanos entre este miércoles y el jueves.
Con estas premisas, las dos partes han pactado una lista encabezada por tres candidatos independientes. El presidente de la Generalitat, Artur Mas, iría en cuarto puesto pero tendrá garantizada la continuidad en el cargo en caso de ganar las elecciones. El quinto lugar correspondería al líder de ERC, Oriol Junqueras.
La lista estará encabezada por el ex eurodiputado de Iniciativa per Catalunya (ICV), Raül Romeva, según ha informado TV3. Las posiciones dos y tres estarán cubiertas por la ex presidenta de la Assemblea Nacional Catalana (ANC) Carme Forcadell y por la actual presidenta de la plataforma catalanista Òmnium, Muriel Casals. Romeva dejó ICV el pasado mes de marzo por su apoyo a la independencia, frente al modelo federal apoyado por el partido.
Raül Romeva | Efe
Para el resto de la lista, los dos partidos se repartirán las candidaturas, en una relación de 60 a 40 por ciento a favor de CDC. A la cabeza de la lista figuran representantes de las entidades independentistas Òmnium Cultural y la Assemblea Nacional Catalana (ANC). El resultado recoge, así, las reclamaciones de las dos partes, ya que ERC defendía una lista íntegramente sin políticos y reservada a las dos citadas entidades soberanistas.
Las dos formaciones ya trabajan en la constitución de un Gobierno de coalición «que ponga en marcha todo lo necesario» para romper con el Estado y lograr la independencia, según el diario El Mundo. ERC ha insistido en la necesidad de que se concrete con claridad la Hoja de Ruta hacia el «punto de ruptura», o declaración unilateral de independencia de Cataluña, en el supuesto de que el bloque secesionista consiga la victoria electoral y de que el Estado se niegue a negociar el proceso de secesión.
El Consejo Nacional de ERC ha advertido en un comunicado, tras reunirse para analizar el pacto con CDC, de que las elecciones del 27-S son “claramente plebiscitarias” y que el acuerdo implica la constitución de un “nuevo Estado”.
El Secretariado Nacional de la ANC ha valorado positivamente el acuerdo alcanzado por CDC y ERC, aunque ha pedido a los dos partidos que les faciliten los «detalles» del pacto para poder valorar su contenido globalmente y trasladar una opinión definitiva al respecto, según ha informado Europa Press.
Por su parte, el secretario general del comité de gobierno de UDC, Ramon Espadaler, declarño ayer martes que los democristianos son ya la única fuerza política que representa al catalanismo moderado, que en su opinión hasta ahora representaba CiU, después de que CDC haya asumido «todo el programa y prerrogativas de ERC».
El diputado de la CUP en el Parlament David Fernández ha criticado el preacuerdo entre CDC y ERC porque, a su juicio, la presentación de una lista única invalida la pluralidad y complejidad del proceso soberanista.