Durante estas últimas sesiones hemos podido asistir a unos movimientos de mercado un tanto incomprensibles. Tras parecer que por fin la renta variable iba a tomar un rumbo bastante claro tras años lastrando la rentabilidad en las principales plazas europeas.
La cuestión es que durante los mejores años de la bolsa americana, la renta variable europea se ha quedado rezagada y es que hemos perdido una oportunidad de oro, ya que siempre hemos mirado de reojo a lo que pasa al otro lado del charco en lo malo y cuando ha venido lo bueno no hemos podido seguir su estela.
Es un hecho que todo parece apuntar a que la bolsa norteamericana está sobrevalorada y durante estas últimas sesiones hemos visto a valores aparentemente fuertes como corregían entorno a un 20%, como es el caso de Under Armour. El principal peligro que podemos atravesar sería la posible corrección que podría experimentar Estados Unidos y en qué medida podríamos vernos arrastrados en Europa por estas caídas.
Lo cierto es que en apariencia, la bolsa americana está aparentemente fuerte y no muestra demasiados signos de debilidad al menos de momento, pero el día que llegue, que llegará, tendremos que estar preparados para saber afrontar el temporal.
El mejor de los escenarios sería una disminución de la correlación con las bolsas estadounidenses como le puede pasar al Footsie inglés que parece que hace la guerra por su cuenta tanto con Europa como con Estados Unidos.
Y es que aunque el Reino Unido ha tenido un año bastante complicado, respecto al Brexit y demás aspectos, ha remontado el vuelo hasta tal punto que viendo el aspecto del gráfico del Footsie 100 no es descabellado pensar que la apariciencia que tiene es inmejorable.
Debemos ir hacia una búsqueda más independiente de la relación que tenemos con Estados Unidos para poder hacer en Europa la guerra por nuestra cuenta y poder seguir nuestro propio rumbo basándonos en nuestra propia economía.
Mientras tanto tendremos que seguir observando este mercado aparentemente incomprensible e intentar identificar oportunidades cuando la tormenta llegue.
Daniel García, analista de XTB