La economía española creció un 1% en el segundo trimestre del año, una décima más de lo que lo hizo en el trimestre anterior, según el avance de datos de la Contabilidad Nacional Trimestral publicado este jueves por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
La tasa interanual, por su parte, se situó en el 3,1% en el segundo trimestre, cuatro décimas más que en el trimestre anterior, acelerando la trayectoria de recuperación que inició en la segunda mitad de 2013. De esta forma, el crecimiento interanual del PIB vuelve a niveles de finales de 2007.
Tal como recoge Europa Press, con el repunte trimestral del PIB entre abril y junio se encadenan ya ocho trimestres de avances, mientras que la tasa interanual acumula siete trimestres en positivo.
Los datos adelantados por Estadística para el segundo trimestre del año coinciden con los avanzados por el Banco de España en su boletín del mes de junio, en el que la institución que gobierna Luis María Linde apuntó a un crecimiento trimestral del 1% y una tasa interanual del 3,1%.
Dada la aceleración que viene experimentando la economía española en los últimos trimestres y de las mejores proyecciones de los organismos internacionales, el Gobierno ha revisado al alza sus previsiones para 2015 y 2016, hasta el 3,3% y el 3%, respectivamente. Los datos del INE para el segundo trimestre del año son aún provisionales y se conocerán a nivel desagregado el próximo 27 de agosto.
BANCO DE ESPAÑA: LA DEMANDA INTERNA TIRA DEL PIB.
Según subrayaba el Banco de España en boletín económico de junio, y tal como recoge Europa Press, el crecimiento de la actividad en el segundo trimestre se apoyó de nuevo en la «fortaleza» de la demanda interna, con un «mayor vigor» del consumo de los hogares y de la inversión en equipo y en vivienda.
Dentro de los componentes del crecimiento, el Banco de España estima que el consumo de los hogares mostró en el segundo trimestre un crecimiento trimestral del 0,9%, dos décimas más que en el primer trimestre, gracias a la «favorable evolución» del mercado de trabajo y la «progresiva mejora» de las condiciones financieras.
Aunque en su boletín de junio el Banco de España destacaba el «elevado ritmo de crecimiento» que experimentó la economía española en el segundo trimestre, también avisaba de que se podría observar una pauta de «cierta contención» en la segunda parte de 2015.
En cualquier caso, gracias al comportamiento de la actividad en la primera mitad del año, «más positivo de lo anticipado en marzo», el Banco de España ha elevado tres décimas su previsión para todo el año, hasta el 3,1%.
Según el supervisor, el incremento del 3,1% en el conjunto del año será consecuencia de una «evolución muy dinámica» de la actividad en el primer semestre y de una «gradual desaceleración» posterior, que se prolongaría el próximo año. La moderación del crecimiento se explicaría por la amortiguación de impulsos como la reducción del precio del petróleo y de la depreciación del euro.