La Diputación Permanente rechaza todas las iniciativas presentadas por la oposición tras cuatro horas de debate inane. «Están haciendo una utilización torticera del reglamento», dice al resto de grupos el diputado popular Agustín Conde.
Cuatro horas de debate, 12 puntos en el orden del día, siete ministros llamados a comparecer y ni una reivindicación de la oposición admitida. El Partido Popular ha vuelto a tirar del rodillo de su mayoría absoluta para tumbar las peticiones del resto de grupos, que reclamaban que siete ministros acudieran al Congreso en lo que queda de este mes de agosto para dar cuentas sobre asuntos como la atención sanitaria a los inmigrantes indocumentados, la violencia de género o el nombramiento de José Ignacio Wert como embajador ante la OCDE.
En la Diputación Permanente celebrada este miércoles, el PP se ha opuesto a todas las peticiones formuladas por los grupos parlamentarios de la oposición para que distintos miembros del Ejecutivo ‘desfilasen’ durante los próximos días por el Congreso para dar cuentas de diferentes asuntos relacionados con sus Departamentos.
En concreto, el PP no ha dado el visto bueno a que acudiesen al Congreso los ministros de Asuntos Exteriores, José Manuel García Margallo; de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, Alfonso Alonso; de Hacienda y Administraciones Públicas, Cristóbal Montoro; de Fomento, Ana Pastor; de Educación, Íñigo Méndez de Vigo; de Interior, Jorge Fernández Díaz; y de Empleo, Fátima Báñez.
El diputado ‘popular’ Agustín Conde ha arremetido contra los partidos de la oposición por pedir estas comparecencias a escasos días de que empiece el periodo ordinario de actividad parlamentaria. «Están haciendo una utilización torticera del reglamento», ha denunciado, informa Europa Press.
Wert sí acudirá al Congreso
Entre las comparecencias solicitadas, el PSOE quería llamar al ministro de Asuntos Exteriores y al propio José Ignacio Wert a explicar en sede parlamentaria la «cacicada» de su nombramiento en la OCDE, según lo definieron los socialistas. Aunque el PP no acepta esta comparecencia, ha aclarado que Wert sí dará cuentas en el Congreso de su nombramiento, pero en periodo ordinario el próximo mes de septiembre y no de forma extraordinaria como querían los socialistas.
La designación de Wert como embajador ante la OCDE poco después de su destitución como ministro provocó las críticas de gran parte de los partidos de la oposición, que acusaron al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, de proporcionarle un «retiro dorado» junto a su mujer, Montserrat Gomendio, poco antes elegida directora adjunta de la Dirección de Educación en la OCDE.
Además de estas solicitudes, se habían registrado varias peticiones para que el ministro de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, Alfonso Alonso, detallara las medidas del Gobierno para combatir la violencia de género y la protección de las mujeres víctimas y de sus hijos.
Y también querían que Alonso aclarase la advertencia lanzada por el secretario general de Sanidad, Rubén Moreno, a las comunidades autónomas que han devuelto la atención sanitaria a los inmigrantes en situación irregular, a las que avisó de que esta actuación podría conllevar multas millonarias a diario por parte de la Unión Europea y la paralización de todos los fondos comunitarios.
Los socialistas pedían, asimismo, información de las previsiones del Gobierno para reducir el tiempo de espera del sistema de Dependencia y la pretensión de promover un pacto dirigido al establecimiento de una estrategia de atención sociosanitaria integral y coordinada.
Reunión Rato-Díaz
También ha estado presente en el debate de este miércoles la polémica sobre la reunión que mantuvieron el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, y el exvicepresidente económico Rodrigo Rato el pasado 29 de julio.
El PSOE pedía la comparecencia de nuevo del ministro -que ya acudió este mes al Congreso para hablar sobre este asunto- para detallar el contenido del encuentro e informar también de las reuniones mantenidas por otros altos cargos del Departamento con miembros de las fuerzas de seguridad que trabajan en la investigación al exdirector del FMI y expresidente de Bankia.
Además, se habían registrado varias peticiones de comparecencia del ministro de Hacienda y Administraciones Públicas, Cristóbal Montoro, sobre el reparto de los objetivos de déficit entre las comunidades autónomas y varios informes sobre las previsiones macroeconómicas para el próximo ejercicio. E Izquierda Plural quería que la ministra de Empleo, Fátima Báñez, diera cuentas en el Congreso de «la caída» de la cobertura de las prestaciones por desempleo.
Capital privado en AENA
Además, los socialistas reclamaban que la ministra de Fomento, Ana Pastor, hiciera una valoración del proceso de entrada de capital privado en AENA Aeropuertos, «a la vista de sus resultados económicos». IU considera que la empresa se «minusvaloró» antes de su salida a Bolsa y se pregunta «por qué no se hizo una buena gestión en la época anterior, previa a su privatización, durante los años en que la administró el PP, para conseguir que su valor fuera más aproximado al real».
También el PSOE pedía la comparecencia del ministro de Educación, Cultura y Deporte, Íñigo Méndez de Vigo, para informar de los resultados de la única Conferencia Sectorial de Educación, en la que se acordó con las comunidades autónomas retrasar la aprobación del decreto de reválidas de la LOMCE de ESO y Bachillerato.
La oposición había pedido la comparecencia de un octavo ministro, concretamente el de Justicia, Rafael Catalá, para informar de un nombramiento en el Tribunal Supremo, pero el asunto no llegó a debatirse porque el grupo parlamentario solicitante, el de Izquierda Plural, lo retiró.