Endesa ha destinado 66,8 millones de euros al mantenimiento preventivo de su red de distribución eléctrica y de las masas forestales que la rodean para asegurar la continuidad y seguridad del suministro en el período estival.
Se trata de actuaciones que se desarrollarán durante el verano en las comunidades autónomas donde Endesa opera como compañía distribuidora (Cataluña, Aragón, Andalucía y Extremadura, Baleares y Canarias) y se realizan en colaboración con las administraciones autonómicas y locales.
Consisten, principalmente, en trabajos de limpieza y cuidado de los bosques en las zonas por donde discurre la red eléctrica y otros mantenimientos preventivos como las inspecciones termográficas, además de las habituales revisiones de todas las instalaciones.
En esta campaña, Endesa ha incorporado sistemas LIDAR (Light Detection and Ranging), que combinan tecnología GPS con sensores láser, y permiten realizar mapas tridimensionales de las masas forestales en torno a las líneas eléctricas.
Por territorios, se han destinado 26,4 millones de euros en el marco de esta campaña en Andalucía y Extremadura; 22,3 millones en Cataluña; 6,5 millones en Aragón; 4,6 millones en Baleares; y 6,6 millones en Canarias, cantidades proporcionales a la extensión kilométrica de la red en cada área y a las zonas de protección.
Conservación del entorno vegetal
Del total de 316.500 kilómetros de red eléctrica que integran la infraestructura de Endesa en distribución, aproximadamente un tercio corresponde a líneas áreas que atraviesan terrenos o zonas forestales, y que precisan de una adecuada conservación de las masas de vegetación.
Este año se han destinado 21,6 millones de euros a los trabajos de tala, poda y limpieza de la masa vegetal.
Con estas operaciones se asegura la apertura de corredores de seguridad debajo de las redes tanto de alta como de media y baja tensión, lo que permite evitar incidencias en el suministro eléctrico y minimizar el riesgo de incendio.
Los trabajos de tala y poda selectiva se ejecutan según los criterios estipulados en la normativa nacional y autonómica, que marcan la periodicidad en función del calendario de crecimiento de las diferentes especies.
Endesa ha invertido además 45,2 millones de euros en el programa de mantenimiento predictivo y preventivo, y en la mejora de su red eléctrica de cara a la campaña de verano de 2017.
En el marco de este programa, Endesa realiza diferentes tipos de revisiones en sus instalaciones de distribución. Entre ellas, cabe destacar las termografías de las líneas y subestaciones de media y alta tensión. Consisten en la inspección de la red con cámaras de infrarrojos, ya sea desde tierra o por aire, para detectar si hay algún elemento que presente una temperatura más elevada de lo normal, lo cual indica que sufre una anomalía. En caso de detectarse cualquier anomalía, las coordenadas del “punto caliente” quedan registradas y se activa de forma automática el mecanismo para corregirla.
Helicópteros, drones y tecnología LIDAR
Parte de las termografías se realizan desde helicópteros, que se utilizan para revisar las líneas de media y alta tensión. Endesa revisará este año 6.500 kilómetros de circuitos aéreos de Alta Tensión y 20.000 apoyos desde helicópteros, lo que permite superar los obstáculos que presenta la orografía del terreno y reducir el tiempo necesario para realizar la revisión de las instalaciones. Gracias a las inspecciones realizadas con helicóptero, se puede registrar la vegetación cercana a las líneas eléctricas para mejorar la plantificación de los trabajos de tala y poda.
Este año, Endesa ha incorporado a estas tareas la tecnología LIDAR (Light Detection and Ranging) -Detección por luz y distancia- que combina tecnología GPS con sensores láser y permite realizar mapas tridimensionales y cartografiar las líneas eléctricas. Esta herramienta ofrece simultáneamente información tanto del relieve del terreno como de la vegetación que lo cubre, lo que resulta muy útil para crear mapas de alta resolución de las zonas boscosas y planificar las labores de limpieza forestal.
Además de los helicópteros, Endesa utiliza drones desde 2012 para comprobar el estado de la red. Los drones que utiliza la compañía están equipados con cámaras de alta resolución que permiten captar imágenes de las líneas y son especialmente útiles para comprobar el estado de las infraestructuras en las zonas de difícil acceso sin necesidad de interrumpir el suministro. Los aparatos permiten también verificar la anchura de los corredores de seguridad que actúan como cortafuegos
La mejora de las instalaciones es clave para el buen funcionamiento del sistema eléctrico. Cada año, Endesa incorpora nuevas tecnologías y renueva las infraestructuras existentes con el fin de asegurar la continuidad del suministro. Los trabajos se realizan en elementos e instalaciones -líneas de alta, media y baja tensión, subestaciones, sistemas de protecciones y telecontrol, centros de distribución y puntos de maniobras con telemando- considerados críticos por su relevancia para el funcionamiento del sistema eléctrico
Todas estas acciones han posibilitado que Endesa siga mejorando sus indicadores de continuidad del suministro año a año. En 2016, el tiempo medio de disponibilidad de la red fue del 99,99%, y el Tiepi propio (Tiempo de Interrupción Equivalente de la Potencia Instalada) bajó hasta los 44,8 minutos, el mejor registro histórico de la compañía.
En 2016 la energía total distribuida por las redes de Endesa, a un total de 12 millones de clientes con contratos de acceso a la red, superó los 115.600 GWh, un 1,2% más que el año anterior.