Lejos de los libros de texto, los niños disfrutan ahora de vacaciones o, como mucho, se enfrentan a los célebres cuadernillos de deberes veraniegos; pero los escolares españoles de entre 9 y 10 años tendrán que someterse en la primavera de 2016 a un examen para conocer su nivel de comprensión lectora.
En la primavera de 2016, más de 10.000 alumnos españoles de entre 9 y 10 años y de todas las comunidades autónomas realizarán una prueba para evaluar su nivel de comprensión lectora. Se trata del PIRLS (Estudio Internacional de Progreso en Comprensión Lectora), que se llevará a cabo también en medio centenar de países.
Tal y como explica en su blog el Instituto Nacional de Evaluación Educativa (INEE) en esencia, a los estudiantes se les mide su competencia lectora tanto en el sentido de disfrute y experiencia literaria como en cuanto a herramienta con la que adquirir y usar información. Se medirán en este estudio otras variables sociales, culturales y económicas, como «el contexto personal, familiar y escolar de cada alumno, así como el contexto educativo nacional sobre el aprendizaje de la lectura», explican desde el INEE.
A diferencia del conocido como Informe PISA, que coordina la OCDE, el PIRLS es una evaluación global supervisada por otra asociación internacional, el IEA, en este caso centrada únicamente en métodos de evaluación del rendimiento educativo. No goza de tanta repercusión como aquel, pero será ya la cuarta ocasión en la que se realice esta prueba a nivel internacional (tras las realizadas en 2001, 2006 y 2011).
Más niños que nunca
En el caso de España, en la evaluación de 2016 se evaluarán a más niños que nunca. En el PIRLS de 2011 fueron 8.580 alumnos de 312 centros, pero tal y como ha podido confirmar SABEMOS, en esta ocasión serán más de 10.000 escolares, después de que media docena de comunidades autónomas (Madrid, Castilla y León, Asturias, Cataluña, La Rioja y Andalucía) hayan solicitado al IEA una «muestra ampliada» del estudio. Es decir, que han sido las propias CCAA las que están interesadas en obtener una muestra mayor acerca de la comprensión lectora de sus niños de 9 y 10 años.
No es el PIRLS la única prueba de evaluación en la que las comunidades autónomas españolas están profundizando su interés e incrementando el número de alumnos. Los repetidamente mediocres resultados obtenidos por alumnos y adultos españoles en las pruebas comparativas internacionales parecen haber despertado por fin una cierta sensación de prioridad respecto a este tema. Así, en abril de 2015 el INEE ya anunció que seis autonomías ampliarían la muestra en la prueba TIMSS, que mide las capacidades en matemáticas y ciencias en estudiantes de 4º de Primaria.
¿Como será la prueba?
Tal y como señalan desde el INEE, el estudio consistirá primero en una serie de cuestionarios tipo encuesta destinados a alumnos, profesores, padres y director del colegio. Es gracias a esta parte que los investigadores podrán extraer un análisis fundamentado en datos sobre causas y consecuencias de los resultados por países, comunidades, ciudades y centros.
La «prueba cognitiva» en sí, por su parte, consistirá en un cuadernillo de dos bloques para los que el alumno dispondrá de 40 minutos en cada uno. Cada bloque de evaluación consta de un texto de estímulo de unas 750 palabras (pueden ser literarios o informativos) a los que les corresponde después cerca de una docena de preguntas de varios tipos: «opción múltiple, semiestructurada y abierta o de respuesta construida».
¿Qué nivel de comprensión lectora tengo?
En su página web, el Ministerio de Educación ha colgado las «preguntas liberadas» de otros años; es decir, ejemplos similares a los que se llevarán a cabo en la primavera de 2016 para realizar el nuevo estudio. Se pueden por tanto leer los textos que se presentaron en años anteriores (más abajo un ejemplo) y se pueden hacer las pruebas cognitivas tal cual las hicieron los niños en 2001, 2006 y 2011.
FOTO: MCA en FLICKR