¿Villar de Cañas? No. El primer cementerio permanente de residuos nucleares se está construyendo en Finlandia. Estas instalaciones, bajo el nombre de Onkalo, se están construyendo sobre un lecho de granito a unos cinco kilómetros de las dos centrales de Olkiluoto, en la costa suroccidental de Finlandia.
Está diseñado para mantener residuos de alta radioactividad, los más preocupantes, durante al menos 100.000 años. Este tipo de residuos pueden emitir radiación durante decenas de miles de años y, hasta ahora, se han ido almacenando en las propias centrales, en piscinas, o en instalaciones temporales.
En el bunker de Onkalo, los residuos se encuentran protegidos por un sistema de barreras múltiple basándose en un método desarrollado en Suecia.
Una vez que el centro comience a funcionar, posiblemente en 2023, se introducirán 12 barras de combustible en un recipiente de acero que se mantendrá sellado dentro de una cápsula de cobre resistente a la erosión. Cada cápsula se depositará en su propio agujero y será cubierta de arcilla de bentonita. El lecho de granito será la última barrera, situada a 520 metros de profundidad en una zona de estabilidad geológica en la que no deberían producirse terremotos.
Seguirán aceptándose combustible hasta 2120, cuando será rellenado y dejado para la eternidad.
A Finlandia le llevó 17 años escoger el lugar para el cementerio y la licencia de construcción no fue emitida por el Gobierno finés hasta noviembre de 2015, basándose en una década de pruebas. Posiva Oy es la empresa a cargo de la construcción, que no ha recibido oposición por parte de la población después de infinidad de audiencias públicas y una transparencia envidiable.
Además de Finlandia, Suecia y Francia han elegido emplazamientos para cementerios. Varios países más, como Alemania, Canadá, Suiza y Reino Unido deben elegir aún el emplazamiento definitivo.
A pesar de que Enresa –la empresa pública encargada de la gestión de los residuos radiactivos y titular del almacén nuclear- reconoce que no hay novedades sobre el recurso presentado por el Ejecutivo, y que la situación legal de paralización del proyecto no ha cambiado, la empresa sigue adjudicando nuevos contratos ligados a la futura construcción del cementerio nuclear de Cuenca, informa ‘El Independiente’.