Llegó la hora de irse de vacaciones, de olvidarse de los correos electrónicos, de los madrugones, del ‘tómate el café a la velocidad de la luz que llegas tarde’, de los atascos y de todas esas cosas que todos conocemos perfectamente pero que a algunos les parece una verdadera barbaridad.
Nada de relajarse, de vivir sin saber qué día es, de quemarse los pies en la arena de la playa, de bailar en la verbena del pueblo, de desayunar a las 13 horas…, y ¿por qué? Hay muchas personas que más que disfrutar durante sus vacaciones lo que hacen es vivir con una preocupación constante, con un permanente cargo de conciencia.
Después de meses de trabajo, todo el mundo se merece unas vacaciones para recargar pilas y volver con aires renovados. Sin embargo, hay un tipo de trabajador al que le resulta difícil desconectar e incluso puede llegar a tener sentimientos de culpa por haber abandonado, por unos días, su responsabilidad, una sensación que hay que evitar y combatir.
En Estados Unidos, General Electric ha anunciado que facilitará a sus empleados tomarse unas vacaciones cuando lo necesiten.
«Descansar de manera adecuada, desconectar del trabajo, no sólo va a hacer que te sientas más feliz, más sano, sino que también impactará en la línea de fondo y mejorará tu vida laboral” asegura Alistair Cox, CEO de Hays.
Pero desde que vivimos conectados a Internet y al móvil (casi las 24 horas del día), olvidarse del trabajo es mucho más complicado. Los correos electrónicos, los mensajes y las llamadas llegan casi a cualquier lugar del mundo, y la gente tiene la sensación de deber estar siempre disponible.
A esto también habría que sumar la entrega y dedicación por el trabajo que muchos tratan de demostrar, no solo para cumplir sus objetivos, sino para mostrar que son imprescindibles. La total disponibilidad, como ya hemos dicho, también se ve como un valor, sobre todo en situaciones como la actual, en la que el trabajo se convierte en toda una preocupación.
El trabajador debe irse de vacaciones sabiendo que las merece y sin ningún sentimiento de culpa, y para ello también es importante la postura de la empresa, que debe crear un clima favorable que anime a sus empleados a descansar para después volver con más ganas e ilusión a sus tareas.
Empresas y empleados deben de poner de su parte para que las vacaciones no se conviertan en una carga:
- Para empezar, es muy importante desconectar digitalmente, es decir, evitar abrir correos electrónicos del trabajo o responder llamadas. La excepción la encontramos en esas urgencias que pueden producirse y ante las que si deberíamos responder.
- Interesarse por las vacaciones de los demás, algo que puede hacer subir la moral a quien eso de las vacaciones le parezca un problema.
- Los directivos de la empresa pueden dar ejemplo. Así, si el empleado ve que sus jefes también desconectan y disfrutan de sus vacaciones, se verá más motivado y seguro de los beneficios que aportan.
- Además, la empresa debe animar a los empleados a irse de vacaciones, en lugar de hacerles ver que su ausencia puede ser un problema.Alistair explicaba que “irse de vacaciones, descansar y animar a todo el equipo a hacer lo mismo es más importante de lo que parece».
Imagen | Michael Coghlan en Flickr