El negocio de la comida ‘online’ y de las aplicaciones para gestionar pedidos y repartos de hostelería mueve ya más de 120 millones de euros en España, según los datos de Aloha24, una ‘startup’ española, afincada en Gijón, dedicada a este negocio dentro de la restauración.
Los emprendedores españoles han puesto el ojo en un sector en pleno auge y donde cada vez hay más competidores que ofrecen servicios diferentes, según recoge la agencia Europa Press.
La hostelería y restauración en España mueve al año más de 1.100 millones de euros, con una cuota del 7% sobre el PIB. De ellos, cerca del 11% se corresponde con pedidos de comida a domicilio por Internet.
Actualmente el 22% de las personas que pide comida a domicilio en España lo hace a través de Internet o de las distintas ‘apps’ disponibles en el mercado.
En el último año, los pedidos a domicilio a través de aplicaciones para teléfonos móviles y otros dispositivos similares han crecido más de un 400% en España, si bien nuestro país está un peldaño por debajo de otros países de Europa. En Reino Unido o Francia, el 30% de los pedidos se realizan a través de la Red.
LOS RESTAURANTES FACTURAN UN 20% MÁS.
Las nuevas tendencias tecnológicas y los nuevos gustos por la gastronomía han facilitado la incorporación de la restauración gourmet a las ‘app’ de empresas gestoras de pedidos y reparto, de manera lenta pero progresiva a una modalidad que empezó con los restaurantes de comida rápida.
Un nuevo escenario del que también se han beneficiado los restaurantes que han incorporado su oferta a las distintas ‘app’ y que, según Aloha24, facturan un 20% más que si no estuvieran en este mercado.
Estos datos demuestran que aunque el desarrollo ha sido importante en los últimos años, el mercado aún tiene margen para seguir evolucionando.
¿CÓMO FUNCIONA ESTE NEGOCIO?
Según Aloha24, para darse de alta en una aplicación se requiere una inversión de entre 500 y 1.000 euros anuales para que el establecimiento reciba los pedidos gestionados por la ‘app’. El restaurante adherido puede realizar un seguimiento de los mismos y disponer de un servicio de reparto externalizado.
Desde la ‘startup’ de defienden que este modelo incrementa los niveles de facturación, abre nuevas vías de negocio para restaurantes que no dispongan de este tipo de servicio y amplía los servicios que ofrecen estas nuevas empresas como páginas web, software de gestión hostelera, etcétera.
En función del tamaño del restaurante, las cifras de facturación adicional podrían fluctuar entre los 7.000 y los 50.000 euros.