La XI Legislatura de la democracia, la más corta y estrambótica de todas, echa el cierre a los tres meses y medio de vida por la incapacidad de los grupos parlamentarios para acordar una investidura. El Gabinete del PP está en funciones desde el 21 de diciembre y así seguirá al menos hasta julio, después de que estas seis semanas hayan sido del todo improductivas, por mucho que se haya dado apariencia de actividad parlamentaria con la celebración de plenos y comisiones. Todas y cada una de las iniciativas aprobadas decaen y será como si nunca hubieran existido.
España se mantiene en una interinidad inaudita que le impide aprobar leyes, tener un Ejecutivo con iniciativa política o impulsar relaciones internacionales. Lo que sí ha habido desde la constitución de las Cortes (13 de enero) es mucha escenificación. La atomización parlamentaria y la irrupción de nuevos actores han traído consigo otra forma de hacer política, de momento mucho más vistosa que efectiva. El periodo puede resumirse a través de esta quincena de imágenes.
1. Un bebé en el hemiciclo
La constitución del Parlamento estuvo marcada por las formas de los diputados de Podemos. Su atuendo y sus sui generis promesas coparon el foco mediático, pero nada tuvo más repercusión que el bebé de Carolina Bescansa, presente en el hemiciclo durante la sesión. Su madre lo justificó esgrimiendo que es partidaria de criarlo “con apego”. El resto de grupos le reprochó el gesto, tildándolo de innecesario, “lamentable” y hasta “impresentable”.
2. Patxi, presidente
El PSOE recuperó la presidencia del Congreso de la mano de Patxi López gracias a Ciudadanos, que en una negociación a dos bandas consiguió que el PP no luchara por el cargo y la mayoría absoluta en la Mesa la tuviera la suma de representantes naranjas y populares. Podemos criticó el pacto y aseguró que era un ensayo de la gran coalición. López ha durado seis semanas en el puesto.
3. Podemos, al gallinero
Tras la constitución de las Cortes, la Mesa del Congreso abordó el reparto de escaños para la nueva legislatura, operación que en un primer momento relegó a los diputados de Podemos a las filas superiores. El Grupo de Iglesias se quejó amargamente, denunciando un complot para mandarlos «al gallinero» y logró una rectificación que permitió a los dirigentes morados más reconocibles sentarse a tiro de cámara en todas las sesiones.
4. Rajoy se aparta
El líder del PP fue el primer candidato a la investidura propuesto por el Rey pero, en un gesto sin precedentes, Mariano Rajoy declinó el ofrecimiento aduciendo que no tenía los apoyos suficientes para salir elegido. El resto de partidos se lo reprochó duramente, al considerarlo un movimiento táctico y egoísta.
5. Sánchez intenta un imposible
Pedro Sánchez fue el siguiente nominado por Felipe VI. Pese a que también estaba muy lejos de tener el respaldo de la mayoría del Congreso, el líder del PSOE asumió el reto. «Voy en serio», proclamó antes de entregarse a una operación que muchos vieron inviable desde el principio: articular un pacto a dos bandas con Ciudadanos y Podemos.
6. Guerra fría entre Rajoy y Sánchez
El candidato a la investidura inició una ronda de contactos con el resto de líderes para buscar apoyos. La cita con Rajoy la dejó para el final y avisó de que era meramente protocolaria, puesto que no negociaría un acuerdo con el PP. El encuentro reflejó el abismo que separa a ambos líderes, que ni siquiera se estrecharon las manos ante las cámaras.
7. La mesa de izquierdas, flor de un día
Alberto Garzón impulsó una mesa de negociación de las fuerzas de izquierda (PSOE, Podemos, confluencias, Compromís e IU) para intentar un pacto de Gobierno. Se reunieron 22 negociadores durante horas, en una cita que tuvo más de 50 turnos de palabra y que avanzó mucho en política social, estancándose en lo económico. La iniciativa moriría a las 48 horas, tras la firma del pacto de legislatura entre Pedro Sánchez y Albert Rivera.
8. Pacto de El abrazo, mucha pompa y poca circunstancia
El acuerdo alcanzado entre PSOE y Ciudadanos tras dos semanas de intensas negociaciones estuvo adornado de una impresionante escenificación. Sánchez y Rivera lo firmaron en la Sala Constitucional del Congreso y posteriormente comparecieron junto al cuadro El abrazo, de Juan Genovés, símbolo de la Transición. Ambos aseguraron que estábamos ante un hito histórico, pero lo cierto es que el documento fue rechazado por la inmensa mayoría del Congreso y hoy ya es algo caduco.
9. Un beso contra la cal viva
Pablo Iglesias fue el gran protagonista de la segunda jornada de la sesión de investidura de Sánchez. Sus furibundos ataques contra el PSOE -culminados con una arremetida directa contra Felipe González, a quien acusó de tener el pasado «manchado de cal viva»- soliviantaron a las filas socialistas. El beso en la boca que luego le plantó en pleno hemiciclo a su compañero de Grupo, Xavier Domènech, copó la atención de las cámaras y contribuyó a dulcificar la imagen de duro que había dado con su intervención.
10. Investidura fallida por primera vez
El viernes 4 de marzo pasará a la historia como el día en que por primera vez un candidato a la presidencia del Gobierno fue rechazado por el Congreso. Nunca antes había ocurrido. Y solo dos aspirantes, Leopoldo Calvo-Sotelo (1981) y José Luis Rodríguez Zapatero (2008), fueron elegidos en segunda vuelta por mayoría simple al no alcanzar la absoluta en primera votación. Sánchez se quedó muy lejos de La Moncloa (131 ‘síes’ y 219 ‘noes’).
11. Guerra Congreso-Gobierno
Otro hecho inédito acaecido en esta singular legislatura es el conflicto Congreso-Gobierno. Los poderes legislativo y ejecutivo no se han puesto de acuerdo sobre si procede o no que las Cortes celebren sesiones de control a un Gabinete en funciones y la discrepancia acabará en el Tribunal Constitucional. Mariano Rajoy compareció para informar de los Consejos Europeos, pero no aceptó sesiones con preguntas orales, como tampoco sus ministros. Sí comparecieron en comisión para cuestiones puntuales Margallo, Guindos o Montoro.
12. La reunión a tres, el canto del cisne
El último interno por salvar la legislatura se vivió con el encuentro PSOE-Ciudadanos-Podemos, celebrado a petición de los socialistas. Los emergentes constataron ahí sus profundas diferencias y ya no hubo más citas, abocando a la repetición de los comicios que se confirmó tras la última ronda de audiencias del Rey.
13. Soria no llega a junio
El ministro de Industria, Energía y Turismo en funciones, José Manuel Soria, será uno de los pocos que no repita en las listas electorales de junio. Su vinculación a empresas radicadas a paraísos fiscales y las contradictorias explicaciones que ofreció acabaron con su carrera política. Soria renunció a sus funciones, a la presidencia del PP canario y a su acta de diputado.
14. ¡Quijote presidente!
Estos meses de teatralización no podían haber tenido mejor colofón que el vivido con el IV centenario de la muerte de Miguel de Cervantes. El Congreso celebró una serie de eventos que culminó con la aparición en la tribuna de oradores de un actor caracterizado como el genial escritor. En las redes sociales se reclamó con sorna que su creación más célebre, Don Quijote de la Mancha, fuera elegido como solución de consenso para gobernar España.
15. Felipe VI baja el telón
El punto y final lo puso el Jefe del Estado el martes por la tarde. Su tercera ronda de consultas acababa sin un candidato a la investidura y se confirmaba así la insólita circunstancia de reedición de las generales que vivirá España. Algo que tiene muy pocos precedentes en el mundo y que evidencia la escasa capacidad de entendimiento que tienen actualmente los partidos políticos.