Compartir coche en alguna de sus variantes está de modo. Tras la explosión de Uber, poco a poco conocemos toda clase de negocios sobre ruedas con el fin de que la gente gaste menos, como es el caso de Drivy.
La plataforma de alquiler de coches entre particulares Drivy llega a Barcelona y en los próximos meses prevé desembarcar en Madrid y otros destinos españoles, ha informado en un comunicado este martes.
La plataforma, que se lanzó hace cinco años en Francia, su mercado originario, y hace ocho meses que ha entrado en Alemania, cuenta con 38.000 coches y 600.000 usuarios entre ambos mercados.
Drivy consiste en compartir los vehículos cuando no se utilizan, ya que, según el responsable de Drivy en España, Jaume Suñol, en el mercado nacional hay 22 millones de coches que pasan el 93% del tiempo aparcados.