¿Frío o con hielo, con o sin aceituna, en copa de cóctel o en vaso de caña? Pues depende, como todo en esta vida. A fin de cuentas, el vermut es un vino, Un vino aromatizado, preparado a partir de otros vinos mediante especias como la artemisa el o ajenjo y edulcorado con azúcares, caramelo y mostos de uva. Nos tomamos el aperitivo en La Hora del Vermut, el espacio más castizo de Platea Madrid, para poner a prueba nuestros conocimientos vermuteros ante Álvaro Martínez y la centenaria bodega Martínez Lacuesta. He aquí un decálogo a prueba de listillos.
- El secreto mejor guardado por los fabricantes de los buenos vermuts está en las especias y flores que intervienen en su elaboración: ajenjo, anís estrellado, hinojo, clavo, cardamomo, corteza de naranja, vainilla, canela, salvia, nuez moscada, jengibre, melisa… Los gustos y olores que pasan al vino son en muchos casos muy amargos y a la habilidad del enólogo debe unirse la del licorista para crear un vermut equilibrado.
- El vermut se puede preparar en distintos vasos: corto de cerveza o vino, ancho y bajo de cristal (relativamente fino), algo más ancho y alto de cristal (un poco más grueso) o copa de cóctel. Depende del momento, del color, de la intensidad… pero sobre todo del gusto.
- Eso sí, siempre hay que servirlo bien frío. Entre 6 y 8 grados. Si se le añade hielo, que sea de buena calidad, grueso y compacto, para que no ceda sabores extraños al vermut.
- El vermut rojo se puede servir con piel de naranja y una aceituna. El blanco, con media rodaja o piel de limón y aceituna. La naranja acentúa el amargor; el limón la acidez.
- Si nos gustan las bebidas amargas, podemos añadir al vermut rojo unas gotas de angostura.
- Conviene tomarlo antes de comer, popularmente conocida como “la hora del vermut” porque ayuda a abrir el apetito.
- El mejor maridaje del vermut es con encurtidos, berberechos, navajas, mejillones y anchoas en salazón o boquerones en vinagre.
- Si nos parece que tiene mucho grado alcohólico, podemos rebajarlo mezclándolo con tónica o gaseosa. No es ningún pecado.
- En cóctel descubriremos otras particularidades del vermut. Uno muy sencillo se consigue empapando la copa con ginebra antes de servir el vino para que este se vuelva más seco.
- El vermut se puede usar para cocinar numerosos platos, como ingrediente principal o reduciéndolo para salsas. Incluso en gelatina.
*Bodegas Martínez Lacuesta (Haro, La Rioja) elabora vino desde 1895 y cuatro tipos de vermut desde 1937 a partir de un sistema tradicional y artesano a base de extracto de plantas y hierbas naturales maceradas en frío en vino blanco que, una vez preparadas, se añaden a la base del vermut con azúcar, cítrico, caramelo y alcohol.