El ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación, José Manuel García-Margallo, ha afirmado este lunes que, en el reparto de los refugiados sirios entre países europeos, España asumirá «la máxima cuota que pueda», pero ha dejado los detalles en manos del grupo interministerial creado para este asunto que se reunirá este lunes en Madrid.
«España está dispuesta a hacer lo máximo que pueda«, ha aseverado desde Teherán, en declaraciones recogidas por Europa Press. En todo caso, ha precisado que será la comisión interministerial la que analice los detalles porque «cualquier compromiso de acogida debe ir acompañado de recursos», y eso exige una cuantificación presupuestaria que no depende de Exteriores, sino de Hacienda.
El ministro ha llamado a todos los países europeos a hacer el máximo esfuerzo posible en esta crisis. Este lunes se reúne en Madrid, a las 13.30 en el Palacio de la Moncloa, el grupo interministerial creado por el Gobierno, que preside la vicepresidenta del Ejecutivo, Soraya Sáenz de Santamaría. Está previsto que a la cita acudan los ministros del Interior, de Empleo y Seguridad Social y de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad.
Por su parte, el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, ha afirmado este lunes que es prematuro hacer un cálculo de cuánto costará la acogida de refugiados sirios, pero ha garantizado que, «por descontado, España tiene los medios necesarios».
En una entrevista en la Cadena Cope recogida por Europa Press, el ministro ha precisado que las responsabilidades se coordinarán «entre el conjunto de las administraciones». Según ha dicho, aún no puede estimarse el coste porque «todavía se está discutiendo la cifra de emigrados» que España tendrá que acoger y ha dejado claro que la responsabilidad se compartirá con los socios europeos.
Asimismo, el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, ha asegurado este lunes que España va a estar «a la altura de las circunstancias» en la crisis de refugiados, ya que, según ha subrayado, se trata de un país «solidario» y de «acogida». Eso sí, ha señalado que el Gobierno del PP debe «coordinar» todas las iniciativas de «solidaridad» que están surgiendo en la sociedad española.
En declaraciones a su llegada al Comité Ejecutivo Nacional del PP, que preside Mariano Rajoy, Fernández Díaz ha indicado (citado por Europa Press) que forma parte de la «tradición» de España el respeto a los derechos humanos y la solidaridad entre personas, «como los refugiados que huyen del drama de la guerra».
Rajoy, «traumatizado»
Por su parte, el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha reconocido este lunes ante la reunión del Comité Ejecutivo Nacional del PP que está «traumatizado» por las imágenes de refugiados sirios que se han difundido en las últimas semanas y ha mostrado su disposición a ponerse «manos a la obra» para «demostrar que España es uno de los países más solidarios».
Así lo ha asegurado en rueda de prensa el vicesecretario de Comunicación del PP, Pablo Casado, que ha explicado que en esta reunión de la cúpula del partido ha visto al presidente del Gobierno con «vocación de arremangarse» en este asunto. Eso sí, ha dicho que debe encontrarse una solución global y de consenso en el seno de la Unión Europea.
ACNUR, la CE y la postura española
El pasado viernes, el Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados, António Guterres, advirtió de que la falta de una respuesta europea adecuada a la actual crisis de refugiados “sólo beneficia” a las mafias y reclamó un programa de alojamiento masivo “de participación obligatoria para todos los Estados miembros”. «Las primeras estimaciones indican la necesidad de alojar a hasta 200.000 personas”, añadió.
Por su parte, el presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, tiene previsto proponer a los Estados miembros un nuevo cupo de 120.000 demandantes de asilo, que se uniría a los 40.000 propuestos inicialmente el pasado mes de mayo, según informaron fuentes comunitarias al diario El País.
El nuevo cupo elevaría a 160.000 el número total de refugiados que se reubicarían para para aliviar a los países más presionados por el flujo de entradas. Según las fuentes, Juncker detallará estas propuestas en su discurso sobre el Estado de la Unión que pronunciará este próximo miércoles en el Parlamento Europeo.
Las propuestas de la CE deberán ser examinadas el próximo 14 de septiembre por los ministros del Interior de la UE, que se reunirán en Bruselas para abordar la crisis. Antes de este verano, la postura de España y de los países del Este y del Báltico hizo descarrilar la propuesta de reubicar a 40.000 personas en dos años, cifra que se quedó en 32.000, revisable en diciembre.
Desde entonces, el empeoramiento de la crisis y la presión de Alemania para que los países se impliquen han permitido suavizar las posturas más radicales, entre ellas las de España, que podría aceptar una cuota mayor de refugiados. España sólo ha aceptado hasta la fecha un cupo de 2.739 refugiados, pero el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, apuntó el pasado martes en Alemania que se podría incrementar el número y reclamó, como condición para ello, un marco político global europeo para temas de inmigración y de asilo.