Ferraz incluye a cuatro ajenos a la federación madrileña en la plancha electoral más importante y lo anuncia sin esperar a que el Comité Regional lo avale. El sector crítico transmitirá hoy el «cabreo generalizado» de la militancia por haber sido «ninguneada» en el proceso.
Pedro Sánchez ha elaborado a su medida la lista al Congreso por Madrid y lo ha hecho sin respetar la autonomía del PSOE-M, que hoy debe validar la plancha electoral. Esa es la lectura que hace gran parte de la militancia de la formación, más allá del sector que en julio se opuso al cambio de estatutos que ha facultado a Sánchez para pilotar este proceso.
«La lista por Madrid tradicionalmente ha integrado al entorno del aspirante a La Moncloa, que siempre la encabeza, pero dejando margen de maniobra a la federación y, sobre todo, contando con ella en todo momento», explica un destacado miembro del PSOE-M. La indignación no está presente solo entre quienes votaron en contra de la Ejecutiva nombrada por Sara Hernández en el Congreso Extraordinario de julio, sino que afecta también a militantes que aceptaron el cambio de rumbo impuesto por Ferraz, con la esperanza de que sirviera para enterrar la histórica división interna. En esas filas se encuadraba, por ejemplo, Javier Corpa, miembro de la dirección de Hernández que dimitió cuando Antonio Miguel Carmona fue fulminado.
El aparato cambió en julio los estatutos del PSOE-M para dejar a Sánchez manos libres con la elaboración de la lista
El descontento viene provocado por el «desprecio» a la democracia interna, pero también por el papel secundario que el socialismo madrileño tendrá en la lista de su circunscripción. La número dos elegida para formar tándem con Sánchez, Meritxell Batet, milita en el PSC -partido distinto al PSOE, por muy hermanado que esté-; la número cuatro, Mª Luz Rodríguez, es vallisoletana y milita en el socialismo castellanomanchego; la número seis, Zaida Cantera, es independiente; y el número siete, Eduardo Madina, es uno de los grandes activos del PSE.
Así las cosas, la federación madrileña solo aportará, aparte de Sánchez, a Antonio Hernando (3), Rafael Simancas (5), Ángeles Álvarez (8) y José Enrique Serrano (9). Todos ellos de la más absoluta confianza del secretario general. El 45% del partido que no votó a Hernández, que fue excluido de la Ejecutiva autonómica y que no respaldó la reforma de los estatutos, no tendrá espacio.
Comienzo ilusionante hacia el cambio d gobierno en España con @sanchezcastejon junto a Meritxel Batet y @ZaidaCantera pic.twitter.com/IAaH70TI4V
— PSOE-Madrid (@psoe_m) septiembre 30, 2015
Los nombres han ido anunciándose a lo largo de la semana, sin esperar a ser refrendados hoy por el Comité Regional del PSOE-M, máximo órgano de la federación entre congresos. «Será un mero trámite, se aprobará sin problemas porque está viciado», explica uno de sus miembros, «pero es muestra de cómo ya no se preocupan ni por guardar las formas». Y es que la reforma estatutaria de julio redujo el órgano de 600 a 350 miembros, de los cuales en torno a 90 fueron designados en ese mismo cónclave en el que el partido evidenció una fuerte división. El resto ha sido elegido en las agrupaciones, resultando un equilibrio de fuerzas entre el sector crítico y el próximo a Hernández y a Ferraz «casi al 50%», explican miembros del Comité.
Como los designados en el cónclave estival inclinan la balanza hacia los intereses de Sánchez, “la votación la tiene ganada, pero va a haber una fuerte contestación interna en el turno de palabra, vamos a dejar claro nuestro descontento y el cabreo generalizado que hay en el partido”, avanza uno de los críticos. Esa misma fuente explica que del 19 al 23 septiembre se celebraron «unas 150 asambleas» en el socialismo madrileño para «dar su opinión sobre la lista al Congreso» y «está claro que en ninguna se propuso a Meritxell Batet o a Zaida Cantera», ergo se han seguido «todo tipo de criterios menos el de escuchar a la militancia».
Y el aparato del PSOE-M lo admite «porque se ha convertido en el patio trasero de juegos de Ferraz, no tiene ningún músculo ni autoridad, es que ni siquiera ha llevado el asunto a la Ejecutiva, esta situación es impensable que se hubiera dado en Andalucía, en Extremadura, en La Rioja o en Castilla-La Mancha».
Objetivo: salvar al núcleo duro
Una sensación extendida también en las filas del socialismo capitalino es que Sánchez ha promocionado a Batet y a Rodríguez, miembros de su Ejecutiva y del grupo de expertos que diseña el programa electoral, porque en sus respectivas regiones no disponían de apoyo suficiente. La opinión ha sido recogida, por ejemplo, en el blog de la militante de base Marta Garrote, a quien Ferraz abrió expediente recientemente por haber protestado en la sede del partido contra la destitución de Tomás Gómez y la disolución de los órganos del PSOE-M en febrero.
«Las listas se hacen escuchados los afiliados en asamblea y se aprueban en los Comités Provinciales, en el caso de Madrid en el Regional, aunque la última palabra la tenga la Comisión Federal de Listas. Resulta un insulto a la militancia (…) que la lista se filtre a los medios y nuestro secretario general presente a sus fichajes estrellas a bombo y platillo, cuando el Comité Regional del PSOE-M aún no se ha reunido para aprobar esa lista», argumenta Garrote en un post publicado ayer.
«¿Qué le hemos hecho a Sánchez las militantes de Madrid, sus compañeras de federación?», clama una militante
Además, la militante socialista expresa su descontento por la mencionada inclusión de Batet y Rodríguez, en detrimento de miembros de la federación que han «peleado en la calle por la defensa del Estado del Bienestar que tanto ha maltratado el PP madrileño». «¿Qué le hemos hecho a Pedro Sánchez las militantes de Madrid, sus compañeras de federación, a las que mejor debería conocer?», se pregunta.
Parte de los descontentos con esta y otras actitudes del aparato han comenzado a organizarse en un colectivo denominado #LasBasesDecidimos, que este viernes presentará un manifiesto haciendo público su malestar. El grupo denunciará «la sucesión de graves episodios» sucedidos los últimos meses y que van desde la disolución de la Ejecutiva de Gómez a la «elección unilateral de la lista de diputados a la Asamblea», pasando por «el cambio de nombre y ubicación de la sede de nuestro partido» o el cese de Carmona. Su objetivo es «recuperar el PSOE para el socialismo y la unidad de criterio en las cuestiones fundamentales».
Mañana 2 de octubre, a las 19 hs., presentación del MANIFIESTO #LasBasesDecidimos pic.twitter.com/v1CPLkltEJ
— #LasBasesDecidimos (@BasesDecidimos) octubre 1, 2015
Dicho manifiesto se difundirá cuando ya esté concluyendo el Comité Regional, que abordará además de la deliberación sobre la plancha al Congreso la validación de su reforma. Este punto fue considerado irregular por el sector crítico. «Lo lógico es que si hay un cambio en el funcionamiento sean los miembros que lo componen en el momento en que se produce los que lo avalen, no el Comité que sale como consecuencia de la transformación», explica uno de los impulsores de la impugnación del Congreso. El asunto está en manos de la Comisión de Ética y Garantías, que aún no ha dado respuesta.
La lista del PSOE por Madrid de 2015 se parecerá muy poco a la de 2011. La federación madrileña aprobará hoy la propuesta hecha por Ferraz -una candidatura integrada en los nueve primeros puestos por Pedro Sánchez, Meritxell Batet, Antonio Hernando, Mª Luz Rodríguez, Rafael Simancas, Zaida Cantera, Eduardo Madina, Ángeles Álvarez y José Enrique Serrano-, donde solo repiten Hernando, Simancas, Álvarez y Serrano. El partido maneja estudios que le otorgan no más de siete u ocho escaños por la circunscripción madrileña, frente a los diez obtenidos hace cuatro años, con Alfredo Pérez Rubalcaba y Elena Valenciano en los primeros puestos.