Los dos grupos hoteleros se disponen a desembarcar en la isla aprovechando la nueva era de las relaciones entre EEUU y Cuba. Starwood es la primera hotelera estadounidense en anunciar su llegada a Cuba con dos hoteles, y Marriott ya ha recibido la autorización de Washington para hacerlo.
Desde el pasado noviembre y hasta la semana pasada, la cosa parecía hecha. Marriott había lanzado una oferta de compra sobre su rival Starwood, éste la había dado por buena y se negociaba de qué manera integrar las dos compañías y cerrar la operación en unos meses más. Pero al final parece que nones.
Y es que un consorcio de inversores liderado por la aseguradora china Anbang ha irrumpido en la operación que iba a crear el mayor grupo hotelero del mundo. Anbang y sus socios han presentado una oferta mucho mejor que la de Marriott para tomar el control de Starwood (que gestiona marcas tan reconodidas como Sheraton, Westin, St. Regis, Le Meridien, W…).
La nueva propuesta valora el grupo en 13.200 millones de dólares y el pago es con dinero contante y sonante, mientras que la oferta de Marriott ascendía a 12.200 millones y la mayoría se abonaba en acciones. Así que Starwood ha anunciado a su primer pretendiente que rompe con él y que se va a quedar con la oferta del nuevo candidato chino.
En mitad de la ruptura, ahora Starwood y Marriott se disponen a encontrarse -para competir- en un nuevo mercado que hasta hace año y medio era impensable, o simplemente imposible para dos compañías estadounidenses. Y es que Starwood se ha convertido este fin de semana en la primera hotelera estadounidense en más de medio siglo en firmar un convenio con el Gobierno de Cuba para asumir la gestión de dos hoteles en la isla.
El acuerdo de Starwood y el régimen cubano, el primero desde 1959 y suscrito en la víspera de la histórica visita de Barack Obama a la isla, contempla la explotación de dos establecimientos en La Habana antes de 2017: el mítico Hotel Inglaterra, que se incluirá en la exlcusiva ‘The Luxury Collection’ del grupo, y el Hotel Quinta Avenida, que será operado bajo la marca económica Four Points by Sheraton.
Asimismo, Starwood ha suscrito una primera cara de intenciones con las autoridades cubanas para sumar próximamente un tercer establecimiento en La Habana, el Hotel Santa Isabel, que también entraría en ‘The Luxury Collection’.
En paralelo, el gigante Marriott ha obtenido ya la autorización oficial del Tesoro de Estados Unidos para poder hacer negocios en Cuba. El grupo hotelero negocia con el Gobierno cubano la incorporación de algún establecimiento, pero aún no ha sellado ningún acuerdo formalmente. Las dos compañías que se iban a unir en el mayor grupo hotelero global ahora se disponen a competir por las oportunidades de negocio que ofrece Cuba.