El presidente del Gobierno de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, ha precisado este jueves que lo único que le dijo el Rey Felipe VI sobre el presidente de la Generalitat de Cataluña, Artur Mas, es que éste mantiene su postura en el proceso independentista y que “no” veía posible reconducir su postura.
Revilla se reunió con el Rey en el Palacio de La Zarzuela el miércoles, cinco días después de que el monarca recibiera en audiencia al presidente catalán. Al término del encuentro, declaró a los periodistas que Felipe VI le había transmitido que la postura de Mas es «irreconducible».
Tras indicar que en algunos medios ha leído cosas que, según asegura, no ha dicho, el dirigente autonómico ha explicado que el miércoles le preguntó al Rey cómo fue la conversación con Mas y si había alguna forma de «reconducir la postura» del presidente de la Generalitat y de que «atendiera a razones».
«Me dijo simplemente que no. Pero nada más, lo demás es cosa mía todo», ha añadido en referencia a la idea de que, en esta situación, «vamos derechos al precipicio». En declaraciones a RNE recogidas por Europa Press, Revilla ha dicho que lo único que le trasladó el Rey es que «no había notado ningún cambio» en la postura de Mas.
El presidente cántabro ha señalado que «España tiene un problema gordísimo con el tema catalán porque esta persona está completamente desatada» y ha optado por «tirar hasta el fondo», ignorando que «en el fondo hay un precipicio». Esto tiene a Felipe VI «muy preocupado», ha afirmado Revilla, precisando que, de la hora y media que pasó con el Rey, una hora la dedicaron a abordar la cuestión de Cataluña.
Por otro lado, ha insistido en la necesidad de «hacer pedagogía». Lo que le dijo al monarca es que, a su juicio, el problema no solo es Mas, sino una opinión pública catalana que «no ve las consecuencias» de una eventual declaración unilateral de independencia, y por eso abogó por explicar que esto sería un «desastre» para Cataluña y para toda España.
A la pregunta de si apoya que se aplique el artículo 155 de la Constitución en caso necesario, Revilla ha contestado que sería «una situación absolutamente extrema» y que no cree que sea preciso hacerlo. Desde su punto de vista, primero hay que intentar convencer a los catalanes para que en las próximas elecciones autonómicas no den la victoria a la lista de CDC y ERC.